Las consultas en materia energética solicitadas por Washington y Ottawa bajo el Tratado México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) no serán un obstáculo para concretar el nearshoring o relocalización de empresas en el territorio mexicano, consideró Barclays.
Analistas del banco de inversión señalaron que la relocalización de firmas como consecuencia de la disrupción de las cadenas de suministro que se originó por la pandemia del covid-19, es “una oportunidad única en la vida para México”, pues esta dará crecimiento económico al país.
Los analistas recordaron que Estados Unidos y Canadá solicitaron en julio iniciar consultas sobre la política energética del presidente Andrés Manuel López Obrador, la cual ha afectado a firmas privadas que operan en el sector energético, principalmente por los cambios a la Ley de la Industria Eléctrica (LIE) y por dar prioridad a la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y a Petróleos Mexicanos (Pemex).
Comentaron que tras concluir el primer periodo de 75 días, se ha extendido otro más para resolver el punto sobre la LIE.
Indicaron que las consultas se resolverán, por lo que ni la queja reciente sobre las importaciones de maíz transgénico a partir de 2024, son un riesgo para la relocalización.“La seguridad nacional, en particular la alta tecnología, tiene más peso, dadas las circunstancias geopolíticas actuales”.
Destacaron que México se beneficiará, pues la regionalización de las cadenas de suministro debería impulsar su actividad manufacturera.
El análisis identificó seis categorías de productos (computadoras, equipos de telecomunicaciones, plásticos, calzado, textiles y muebles) con un valor total de 147 mil millones de dólares en los que México tiene mayor probabilidad de sustituir las importaciones estadunidenses de China. “Esto podría impulsar las exportaciones mexicanas a Estados Unidos en alrededor de 38 por ciento.
“Es un cambio estructural similar al que trajo la negociación del TLCAN en 1994”, pero destacó que la relocalización “ya se está viviendo”.
En 2021 la inversión extranjera directa (IED) fue de 32 mil millones de dólares, por lo que México se ubicó entre los 10 principales destinos, ligeramente por encima de Alemania. Barclays espera que supere los 40 mil millones de dólares este año. “El aumento significativo de nuevas inversiones indican que la externalización cercana ya está ocurriendo en México, incluso en un gobierno no tan favorable a las empresas”, dijo.
Anotó que otro indicador de que la megatendencia mundial ya ocurre en territorio mexicano es la inversión fija bruta , la cual alcanzó niveles precovid en marzo.
Destacaron que si bien México tiene desafíos internos, el apoyo de Estados Unidos puede impulsar a la industria manufacturera mexicana, pero también recuperar el crecimiento promedio de la economía mexicana en los últimos 40 años (2.3 por ciento) y hasta aumentarlo un poco.
Entre las ventajas de México para la relocalización subrayaron la ubicación geográfica, la cual permite menores emisiones contaminantes respectó a China, que además controla 40 y 96 por ciento de la producción de embarcaciones y contenedores. Otra ventaja más es el T-MEC.