Ciudad de México. El tamaño de la economía mexicana regresó al nivel que tenía antes de la pandemia de covid-19. Entre julio y septiembre pasado acumuló cuatro trimestres consecutivos de crecimiento, impulsados en el último por los servicios y el comercio, según información oficial publicada este viernes.
En el tercer trimestre de 2022 la economía mexicana avanzó 0.9 por ciento a tasa trimestral reportó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
La cifra es un ligero ajuste respecto de una estimación previa del organismo que era de uno por ciento. Con este resultado en términos anuales la economía creció 4.3 por ciento.
Los resultados muestran que de abril a junio de este año el incremento fue de 0.9 por ciento; de enero a marzo uno por ciento, mientras en octubre-diciembre del año pasado se ubicó en cero por ciento.
En el tercer trimestre del año pasado el PIB se contrajo 0.4 por ciento, pero antes se registraron cuatro cuatro periodos de crecimiento tras el desplome de la economía mexicana de 17.1 por ciento como consecuencia de la contingencia sanitaria.
Entre julio y septiembre la economía mexicana logró un valor aproximado de 18 mil 400 millones de pesos que se compara con un monto similar observado en el cuarto trimestre de 2019, es decir, tomó 11 meses la recuperación.
El crecimiento a tasa trimestral se explicó por el impulso que ofreció el sector servicios y comercio, el cual avanzó 1.1 por ciento frente al segundo trimestre, aunque fue 0.1 puntos menor que la estimación original.
Lo anterior significa que el dinamismo de la economía se explica por la expansión del comercio exterior y la mejoría del consumo.
La producción industrial creció 0.6 por ciento en julio-septiembre, 0.3 puntos por debajo del dato preliminar, mientras el sector agropecuario creció 2 por ciento frente al segundo trimestre, tras un ajuste al alza de 0.2 puntos.
El PIB acumuló un aumento 2.8 por ciento a tasa anual en el periodo de enero a septiembre pasado.
Analistas de Citibanamex consideraron que la recuperación de la actividad continuó en el tercer trimestre, aunque a un ritmo ligeramente más moderado respecto al segundo.
Mencionaron que la demanda externa debería desacelerarse debido a las expectativas de un crecimiento del PIB mundial más lento.
Apuntaron que el crecimiento de la demanda interna también debería moderarse a medida que la recuperación del mercado laboral se desacelere, los flujos de remesas pierdan dinamismo, las tasas de interés reales aumenten y la incertidumbre relacionada con factores locales y globales permanezcan elevadas.
Estimaron un crecimiento del PIB de 0.4 por ciento para el cuarto trimestre, lo que implicaría un incremento acumulado de 3 por ciento en 2022.
Analistas de Grupo Monex dijeron que el crecimiento mensual de 0.7 por ciento del Indicador Global de la Actividad Económica (IGAE) de septiembre explica el ajuste que hizo el Inegi en el crecimiento de la economía mexicana al tercer trimestre.
Destacaron que el sector terciario sigue siendo uno de los focos de resiliencia para la economía, pero la industria ha prendido las alarmas pues ha tenido dos meses consecutivos de caída.
Puntualizaron que el dato sorpresivo manda un mensaje de dinamismo en la actividad económica.
“No obstante, cada vez parece más probable que la velocidad del avance de los componentes de la demanda doméstica está relacionada con la persistencia de la inflación”, dijeron.