Qatar. En partido marcado por la veteranía de la Celeste y la calidad emergente de unos surcoreanos liderados por Heung-min Son, Uruguay y Corea del Sur, del Grupo H, se estrenan hoy en el Mundial, en el estadio de la Ciudad de la Educación.
Veteranía contra juventud, bloque contra individualidades, juego estático contra verticalidad es lo que confronta a estos representativos, cuyo resultado es imprevisible, más aún viendo las sorpresas que ha presentado el arranque de la justa.
Sin duda, este es el último baile para muchos jugadores históricos de Uruguay. El bloque de Luis Suárez, Edinson Cavani, Martín Cáceres, Diego Godín y Fernando Muslera, de 35 y 36 años, llega a su fin con su cuarta Copa tras debutar en Sudáfrica 2010 con una semifinal.
Algunos de ellos no están ya en el 11 inicial del seleccionador Diego Alonso, quien puede tirar de su expe-riencia cuando sea necesario. Pero Diego Godín o Martín Cáceres todavía huelen a titular indiscutible en la Celeste, que busca un éxito mundial que ya logró en 1930 y 1950.
En la plantilla de Corea del Sur la carga recae sobre el extremo y delantero del Tottenham Heung-min Son, con Kang-in Lee o Seung-ho Paik a su lado.
Corea del Sur disputa su décimo Mundial seguido y tiene argumentos para avanzar en el sector H que completan Portugal y Ghana.
Los lusos llegan con grandes individualidades y la jerarquía goleadora de Cristiano Ronaldo para convencer en su arranque frente a la fortaleza africana, con el león Iñaki Williams en sus filas. Tienen la etiqueta de favoritos, a pesar de la situación convulsa de CR7 con el Manchester United.
Cristiano vivirá en Qatar su quinto Mundial –como Messi, Maradona, Matthaus y Márquez, entre otros– con el objetivo de guiar a un grupo consolidado que tiene como techo el tercer puesto de 1966.
Portugal debe estar alerta, ya que no han ganado ninguno de sus tres últimos estrenos mundialistas, con dos empates y una derrota. Para ello cuenta con la veteranía defensiva de Pepe y Ruben Dias, y los veloces y técnicos Cancelo y Mendes por los carriles.
El talento emerge en un centro del campo en el que el bético William Carvalho y Rúben Neves sostendrán a un equipo que dependerá de los destellos de Bruno Fernandes. En el ataque, el técnico Fernando Santos debe elegir si da una oportunidad a un Joao Félix lejos de su mejor versión.