El presidente de Chile, Gabriel Boric, llegó anoche a México a cumplir una breve visita oficial de dos días y regresar a Santiago la noche del jueves, gira que originalmente se extendería hasta el sábado pero que fue acortada luego de que se canceló la reunión de mandatarios de la Alianza del Pacífico (México, Colombia, Perú y Chile), a la cual también se sumarían los gobernantes de Ecuador y Argentina.
La cita de la Alianza del Pacífico, programada para jueves 24 y viernes 25, fue cancelada por el presidente Andrés Manuel López Obrador, luego de que se confirmó la imposibilidad de asistir del presidente de Perú, Pedro Castillo, debido a que el Congreso de su país no lo autorizó a viajar. A reglón seguido, López Obrador propuso que la reunión se efectúe en Perú, a lo cual Castillo dijo estar disponible para concretarla.
Sin embargo, López Obrador dejó abierto que tanto Boric como el colombiano Gustavo Petro, el ecuatoriano Guillermo Lasso y el argentino Alberto Fernández, pudieran reunirse de manera informal en la capital mexicana.
La visita de Estado de Gabriel Boric se gestó cuando a finales de octubre estuvo en Santiago en gira oficial la esposa de López Obrador, la doctora Beatriz Gutiérrez Müller, consejera de la Memoria Histórica y Cultural de México, encabezando una delegación que participó en actos en homenaje a la escritora, diplomática y educadora Gabriela Mistral, al conmemorarse el centenario de su viaje y estadía de dos años en México (1922/24) participando de la campaña educativa posterior al triunfo de la revolución.
El mandatario chileno se ausenta del país cuando está en desarrollo una huelga indefinida de camioneros que entra en su tercer día y afecta principalmente el abastecimiento de las ciudades del norte.
Se trata de pequeños y medianos empresarios agrupados en la Confederación de Transportistas Fuerza del Norte en Chile, quienes protestan por el alto precio del petróleo y el diesel, así como la inseguridad en las rutas del país.