Washington. Cientos de ucranios fueron detenidos y desaparecieron forzosamente en Jersón luego de que Rusia tomó la provincia, al evidenciar una campaña “premeditada”, señaló un grupo de la Universidad de Yale que investiga crímenes de guerra.
El Observatorio de Conflictos, un grupo de investigación dependiente de la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Yale, documentó 226 detenciones extrajudiciales y desapariciones forzadas en Jersón. Alrededor de una cuarta parte de ese número fueron supuestamente sometidos a tortura y cuatro murieron bajo custodia. La mayoría de las detenciones y desapariciones fueron llevadas a cabo por el ejército ruso y la agencia de seguridad FSB, y la mitad de los detenidos “no parecen haber sido liberados”, indicó el Observatorio del Conflicto, en un informe publicado antier.
“Estos hallazgos demuestran una serie de denuncias alarmantes sobre el trato a los detenidos, incluidas las denuncias de muertes bajo custodia; el uso generalizado de la tortura y los tratos crueles, inhumanos o degradantes, el saqueo de los detenidos (y) la violencia sexual y de género”, se señaló.
El Observatorio de Conflictos forma parte del Laboratorio de Investigación Humanitaria de Yale, opera de la mano de otras empresas privadas de investigación y cuenta con el respaldo del gobierno estadunidense.
Por otra parte, la fiscalía Ucrania informó que al menos 437 menores han muerto desde el comienzo del conflicto el pasado 24 de febrero, mientras en la ciudad de Lysychansik en la denominada República Popular de Lugansk, murieron al menos dos civiles y cuatro resultaron heridos tras un bombardeo de las tropas ucranias.
En tanto, el vicepresidente del Consejo de Seguridad ruso, Dmitri Medvédev, declaró que Estados Unidos, la Organización del Tratado del Atlántico Norte y la Unión Europea no quieren una ruptura definitiva con Rusia, por lo que intentan empujar a Kiev a las negociaciones.
Moscú envió al secretario general de la Organización de Naciones Unidas, Antonio Guterres, una carta sobre el trato cruel e inhumano a prisioneros de guerra rusos por parte de militares ucranios.
Al tiempo que el gobierno ruso calificó de “provocación” la negativa de Polonia a permitir que el canciller Serguei Lavrov participe en una reunión de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa.
Rusia e Irán habrían alcanzado un acuerdo para el ensamblaje de drones iraníes en suelo ruso para evitar así las suspicacias que genera el uso de drones iraníes en Ucrania y mantener su postura de neutralidad formal, publicó ayer el diario The Washington Post.