Hipólito Rojas, dirigente en Oaxaca de la Confederación Internacional de Trabajadores (CIT), que encabeza Napoleón Gómez Urrutia, fue liberado ayer por un juez de control, quien finalmente determinó que no había elementos suficientes para vincularlo a proceso por el presunto intento de asesinato del dirigente local de una central sindical.
El representante jurídico de la CIT, Nahir Velasco, señaló que el juez sobreseyó (anuló) el proceso por “falta de pruebas y elementos firmes”, por lo que se ordenó la liberación de Rojas, quien abandonó el centro de reclusión en Oaxaca tras permanecer poco más de cinco meses encerrado.
Velasco recordó que el juez de control Jorge Félix Toledano –el mismo que ayer determinó su libertad–dictó en junio pasado prisión preventiva a Rojas e incluso desestimó jurisprudencia de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, según la cual el proceso por tentativa de homicidio debe llevarse en libertad.
Como informó este diario, el dirigente local de la CIT fue detenido de manera “arbitraria e ilegal” el 14 de junio, cuando acudía a una cita médica en una clínica de Oaxaca, donde fue agredido por una veintena de integrantes de la Confederación Autónoma de Trabajadores y Empleados de México (Catem) Joven. Lo acusaron de ir armado y de intentar asesinar al dirigente de transportistas de esa central, Eduardo Luis Villaseca, quien se encontraba en el mismo hospital.
Velasco resaltó que el senador Gómez Urrutia acompañó en todo momento el proceso legal hasta lograr su liberación.
Catem pretendía arrebatar contratos colectivos en la industria de autotransporte, para lo cual buscaba mantener en prisión a Rojas, recordó el abogado Óscar Alzaga.