Madrid. El propietario de la plataforma Twitter, Elon Musk, sometió la restitución de la cuenta del en la red social del ex presidente de Estados Unidos Donald Trump a una encuesta pública y manifestó que el resultado determinará la decisión final al escribir “Vox Populi, Vox Dei” (voz del pueblo, voz de Dios) en su cuenta.

El sondeo ha superado los tres millones de votaciones en solo una hora de la publicación, cuando la balanza se inclina a favor de recuperar la cuenta del republicano con 56.7 por ciento de los apoyos, mientras que 43.3 restante se ha manifestado en contra de esta decisión.

La red social permite que el usuario personalice el tiempo habilitado para responder a la pregunta, sin embargo Musk ha mantenido la opción predeterminada por la que se da un plazo de 24 horas para participar.

Este viernes, Musk anunció que se habían restablecido varias cuentas de usuarios suspendidas en la plataforma, pero que todavía no había tomado una decisión sobre la de Trump.

Indicó que se habían restablecido los perfiles de la actriz y humorista Kathy Griffin, al psicólogo Jordan Peterson y al portal conservador de noticias satíricas Babylon Bee.

El perfil de Trump en la red social del pájaro azul fue suspendida después del asalto al Capitolio del 6 de enero de 2021, cuando una turba de ultranacionalistas irrumpió en el Parlamento estadunidense para tratar de evitar el traspaso de poderes al presidente electo, Joe Biden, al considerar que las elecciones habían sido amañadas.

Twitter corre riesgo de colapso con salida de ingenieros

El explosivo estilo gerencial de Elon Musk en Twitter ha mermado las filas de los ingenieros de software que mantienen en funcionamiento la plataforma, al grado que expertos del sector y los programadores que han sido despedidos o han renunciado esta semana creen que Twitter podría colapsar pronto.

Cientos de ingenieros y otros trabajadores renunciaron después que el jueves Musk les exigió que se comprometieran a trabajar de forma “extremadamente dura” o que renunciaran con una indemnización por despido.

Las nuevas salidas significan que la plataforma está perdiendo trabajadores justo cuando se prepara para la Copa del Mundo en Qatar, que se inaugura el domingo. Es uno de los eventos más concurridos de Twitter, cuando oleadas de tuits estresan fuertemente sus sistemas.

“Sí parece que va a reventar Twitter”, comentó Robert Graham, un veterano empresario de la ciberseguridad. “No veo cómo no se apagarán las luces en cualquier momento”, aunque muchas de las recientes salidas de Twitter auguraban una muerte más gradual.

Cientos de empleados señalaron que se marchaban antes de la fecha límite del jueves, y publicaron mensajes de despedida, un emoji de saludo y otros símbolos familiares en el tablón de mensajes interno de la compañía en Slack. Decenas de ellos también anunciaron su partida públicamente en Twitter.

Con un escuadrón de programadores de Tesla a su lado mientras desvalijaba un espacio de trabajo que solía ser agradable, Musk no parecía alarmado.

“Los mejores se quedan, así que no estoy superpreocupado”, tuiteó el jueves por la noche el también director general de Tesla y SpaceX. Pero pronto quedó claro que algunos equipos de programación cruciales habían sido completamente desbaratados.

Como muestra de la escasez de programadores, Musk envió el viernes correos electrónicos a todos los empleados en los que convocaba a “cualquiera que escriba software” a su puesto de mando en la décima planta de Twitter a las 14:00 horas.

Tras hacerse del control de Twitter hace menos de tres semanas, Musk echó a la mitad de los 7 mil 500 empleados a tiempo completo de la empresa y a un número incalculable de trabajadores independientes responsables de la moderación de contenidos y de otras tareas cruciales. Luego llegó el ultimátum de esta semana.