El martes 15 de noviembre se llevó a cabo un concierto producto de una particular dinámica en el Multiforo Cultural Alicia. Con apenas un día de anticipación, Panteón Rococó convocó a sus más acérrimos seguidores para asistir a la sala de conciertos independiente como una suerte de réplica al evento ocurrido a finales de octubre en otro punto de la Ciudad de México, en donde un grupo de 300 personas se reunió para hacer apología a la ideología neonazi.

A través de sus redes sociales, la banda proporcionó instrucciones con información y lugares limitados, lo que bastó para agotar en poco tiempo las dos fechas prometidas. Así que el martes, con más de una hora de anticipación, un centenar de fanáticos ya hacía fila sobre avenida Cuauhtémoc para poder garantizar un buen lugar frente al escenario del Alicia.

A las siete de la noche, el público comenzó a poblar la sala de conciertos. Con cervezas en mano, los más enérgicos eligieron un punto para instalarse durante toda la presentación, mientras otros llegaban de a poco hasta terminar abarrotando cada espacio disponible. Alrededor de las ocho, los músicos desfilaban por uno de los costados del Alicia, sólo para ser recibidos con aplausos y los estruendosos gritos de: “Oé, oé, oé, Panteón, Panteón”.

Ya en el escenario, el Dr Shenka, líder de la banda de ska, aprovechó el micrófono para recordar viejos tiempos de Panteón Rococó y sus inicios tocando en el Alicia. Pronto comenzó a sonar Esta noche, tema que fue recibido con unos saltos que lograron estremecer con su fuerza el suelo del lugar.

La banda siguió encadenando una canción tras otra durante casi treinta minutos antes de hacer una breve pausa. Para los músicos, explicó Shenka, el Alicia es una las parroquias independientes del rock mexicano, un semillero, del que han surgido propuestas como la de la exitosa agrupación de ska.

La música no tardó en regresar, ante la promesa del cantante de brindar a su público un concierto largo, “pero poquito”, argumentando las obligaciones laborales que ahora tienen sus más añejos seguidores. Mientras las peticiones de canciones les llegaban de todas partes.

“Tenemos la fortuna de tener espacios como estos para manifestarnos en contra del racismo, en contra del fascismo, en contra de la segregación. Así que esta noche nos gustaría invocar un pequeño coro para hacerle ver a la gente que estamos presentes por la lucha antifascista", pronunció Shenka.

A esas palabras siguió una consigna que el foro completo repitió a coro: "alerta, alerta antifascista. Alerta, alerta antifascista", cantaron al ritmo de la música. El sonido terminó convirtiéndose en el tema Arréglame el alma, misma que fue celebrada por la heterogénea audiencia formada por personas de todas las edades, incluidos niños llevados por sus padres.

En medio del ska también sonaron banda y cumbia. Una pareja subió al escenario, para comprometerse frente a todos. Y los éxitos de Panteón siguieron llegando, hasta culminar en la canción más pedida de la noche. La carencia se escuchó con toda la intensidad de la trompeta, el saxofón y el trombón, mientras frente al escenario se alzaban olas humanas formadas por el slam.

Shenka concluyó la primera de dos presentaciones en el Alicia recordando su consigna: “alerta, alerta antifascista. Podemos ir en paz, esta celebración de libertad y de conciencia ha terminado”, terminó.