Definidas las posiciones en favor y en contra del enfoque del gasto público, la Comisión de Presupuesto de la Cámara de Diputados avaló anoche, con los votos de Morena y sus aliados, el dictamen del Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) 2023, que incluye recursos por casi 8.3 billones de pesos, monto 11.5 por ciento superior al del año pasado.
Durante una reunión que se realizó en un hotel frente a la Alameda por el bloqueo a San Lázaro, el debate entre partidos se enfocó en el recorte de 4 mil 475 millones de pesos al Instituto Nacional Electoral (INE) y en el crecimiento de los rubros prioritarios para el Ejecutivo: el gasto para pensiones, la operación en números rojos del aeropuerto Felipe Ángeles y la continuidad de las obras de la refinería de Dos Bocas y el Tren Maya.
Ante lo álgido de las posturas, donde PRI, PAN, PRD y MC anunciaron por separado su voto en contra, la sesión se alargó con una lista donde había 48 oradores. Una vez votado, el dictamen será debatido a partir de este martes, y por al menos tres días más, en el pleno.
Mientras la oposición acusó que se trata de un presupuesto centralista y no estratégico, porque se enfoca en “los caprichos del Presidente”, Carol Antonio Altamirano (Morena) expresó que los recortes previstos en el dictamen por 6 mil 437 millones de pesos se reasignarán a cumplir el mandato del artículo cuarto constitucional, en materia de subsidios sociales.
“Un voto en favor significa que, por quinto año consecutivo, se asignen fondos a los programas sociales y a una inversión importantísima en infraestructura.”
Agregó que el presupuesto se presenta en un ambiente internacional complejo, a consecuencia de la guerra entre Rusia y Ucrania, y por ello se debe privilegiar el crecimiento económico y el bienestar de la mayoría de la población. “Esto se logra atendiendo primero a los olvidados de siempre, que nunca existieron para los malos gobiernos”.
Ante las críticas de la oposición por no autorizar el aumento que solicitó el INE para 2023, el presidente de la Comisión de Infraestructura, Reginaldo Sandoval (PT), expuso que esos partidos no defienden a la institución, sino a dos consejeros: Lorenzo Córdova y Ciro Murayama.
Citó que el Órgano Interno de Control (OIC) en el INE ha documentado importantes subejercicios, resultado de una práctica recurrente de inflar su presupuesto base, pues de 31 proyectos para los cuales solicita recursos, 29 han generado “ahorros y economías, así como remanentes”.
Sandoval señaló que el OIC corroboró que, a pesar de las reducciones hechas por la Cámara de Diputados al INE entre 2018 y 2022, éste “generó ahorros y economías, previo a los cierres de 2020 y 2021, por 328 millones de pesos y remanentes presupuestales al final de cada uno de los cuatro ejercicios que informan por 419 millones”.
Al incurrir en subejercicios, le permite dar suficiencia presupuestal a los fideicomisos, resaltó.
En contraste, el panista Héctor Saúl Téllez subrayó que el presupuesto continúa destinando abundantes recursos a dos obras emblemáticas del actual gobierno. “A la refinería de Dos Bocas, que supuestamente ya se inauguró, se le asignarán 43 mil millones de pesos más, y al aeropuerto Felipe Ángeles, que ya está en operaciones, otros 900 millones de pesos para que pueda operar en números rojos”.
Blanca Alcalá (PRI) destacó que la consigna es disminuir los recursos al INE y reprochó que se vuelven a presentar “recortes en los mismos rubros para dar prioridad a lo de siempre. El voto del PRI es en contra, porque se beneficia a pocos estados, el presupuesto es discrecional, se gasta más y no se gasta bien”.
