Ciudad de México. La Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) señaló que de acuerdo con la Declaración Universal de los Derechos Humanos, toda persona tiene derecho a la libertad de pensamiento, de conciencia y de religión; que incluye la libertad de cambiar de religión o de creencia, así como la libertad de manifestar su religión o su creencia, individual y colectivamente, tanto en público como en privado, por la enseñanza, la práctica, el culto y la observancia.
La Iglesia Católica se pronunció “en contra del laicismo que busca la ausencia o ‘neutralidad’ religiosa en la vida púbica de nuestros pueblos”, luego de que la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) debatirá un proyecto de sentencia que prohibiría la colocación de nacimientos decembrinos en espacios públicos.
La primera sala de la SCJN debatirá un proyecto de sentencia respecto a un amparo en revisión del municipio de Chocholá en Yucatán. Dicho recurso consiste en una queja ciudadana que argumenta discriminación por el ayuntamiento de ese municipio, porque colocó un nacimiento o Belén en el edificio de gobierno durante la época navideña.
En un comunicado la CEM expresó que “pretender imponer una sociedad sin referentes religiosos, es, implícitamente, querer un sólo estilo de vida, arreligioso, es decir donde prevalezca la negación de las creencias religiosas. Este modelo, discrimina a los seres humanos que sí tienen opciones religiosas y es contrario al Estado Laico. Es absurdo buscar eliminar toda manifestación pública de la vida religiosa. El erario, incluso y como es en los países democráticos, debe estar al servicio de las personas y éstas, tienen orientaciones religiosas”.