Quito. El gobierno de Ecuador recibió ayer mensajes de solidaridad ante la ola de violencia que afronta el país por grupos del crimen organizado, específicamente en la última semana, con explosiones de coches bomba, detonaciones de explosivos, motines en prisiones, y el asesinato de ocho personas, entre ellas cinco policías.

“Estados Unidos rechaza los violentos ataques en Guayaquil y Esmeraldas, Ecuador, y lamenta la muerte de miembros de la Policía”, señaló el subsecretario de Asuntos del Hemisferio Occidental, del Departamento de Estado, Brian Nichols; “ningún país está solo en la lucha contra el crimen organizado y la violencia”, agregó.

Mike Fitzpatrick, embajador estadunidense en Quito, condenó los atentados y aseguró que su país “seguirá respaldando a Ecuador”.

La actual crisis de seguridad comenzó cuando el gobierno y la policía rompieron el orden establecido por la mafia en Guayas 1, prisión de 12 pabellones, y mezclaron a integrantes de las bandas Chone Killers, Los Choneros, Las Águilas, Los Latin Kings, Los Lobos o Los Tiguerones, lo que desató violentos enfrentamientos con disparos y granadas, con la intervención de militares y policías.

Más de 2 mil de los casi 7 mil reclusos fueron cambiados de pabellón o a otras prisiones, según las autoridades, para reducir el hacinamiento y mejorar la infraestructura en el penal. Sin embargo, el traslado enfureció al crimen organizado y sicarios dispararon y atacaron con explosivos estaciones policiales, gasolineras y centros de salud. Por los enfrentamientos en la prisión y las calles hubo al menos ocho muertos, entre ellos cinco uniformados.

El presidente, Guillermo Lasso, que aplicó un estado de excepción en las provincias de Guayas, Esmeraldas y Santo Domingo de los Tsáchilas para tratar de controlar la ola de violencia, destacó ayer en un mensaje en cadena nacional la labor de la policía nacional y afirmó que se dio un gran golpe al crimen organizado.

Reino Unido rechazó los ataques de los grupos criminales y lamentó la pérdida de vidas inocentes, mientras la embajada de España en Ecuador expresó: “Sólo unidos y con los instrumentos del Estado de derecho podremos enfrentarnos a estos preocupantes sucesos”.

La cancillería brasileña anunció que su gobierno condena enérgicamente los ataques y manifestó igualmente su solidaridad con los familiares de las víctimas, así como con el pueblo y las autoridades ecuatorianas.

El embajador de la Unión Europea en Ecuador, Charles-Michel Geurts, declaró que ese país “puede contar con la cooperación de seguridad que moviliza la experiencia de países europeos”.

En otro orden, los cuerpos de tres mineros que estaban atrapados desde hace 14 días en una galería subterránea de Ecuador fueron recuperados ayer.