Milán. Dos barcos alemanes de rescate de migrantes con casi 300 personas a bordo esperaban el sábado frente a la costa este de Sicilia, uno con permiso para desembarcar a sus migrantes más vulnerables y el otro con su pedido de puerto seguro aún sin respuesta, pese a las “condiciones críticas” a bordo.
Casi 1.100 migrantes rescatados a bordo de cuatro barcos operados por organizaciones caritativas europeas están varados en el Mediterráneo, algunos con personas a bordo hace dos semanas en medio de condiciones deterioradas
El caso y la incertidumbre son resultado de la decisión tomada el viernes por la noche por el gobierno ultraderechista de Italia de cerrar sus puertos a los barcos de rescate.
Los barcos Humanity 1 y Rise Above, operados por dos grupos humanitarios alemanes separados, estaban en aguas italianas, ambos solicitando albergue en medio de mares agitados.
El Humanity 1, con 179 migrantes, ha recibido permiso para desembarcar a menores y personas en necesidad de atención médica, pero el pedido del Rise Above de puerto seguro para sus 93 personas rescatadas no ha obtenido respuesta hasta ahora.
Para la noche del sábado, el Humanity 1 no había recibido ninguna comunicación directa de las autoridades italianas sobre las evacuaciones, precisó el portavoz Wasil Schauseil.
La agrupación SOS Humanity criticó la decisión de Italia de distinguir a migrantes “vulnerables”, diciendo que todos fueron rescatados en alta mar, lo que de por sí les hace elegibles para puerto seguro bajo la ley internacional.
El único legislador negro en la cámara baja italiana, Abourbakar Soumahoro, dijo que se sumaría a los migrantes en el barco si el gobierno de la primera ministra Giorgia Meloni no actuaba pronto para ayudar a aquellos varados en el mar.
El ministro del Interior italiano, Matteo Piantedosi, dijo el viernes que el Humanity 1 sería autorizado a estar en aguas italianas solamente por el tiempo necesario para desembarcar a menores y personas con necesidades médicas urgentes.
La medida fue aprobada luego de que Alemania y Francia llamaron a Italia a dar puerto seguro a los migrantes e indicaron que recibirían a algunos de ellos para que Italia no cargara sola con toda la responsabilidad.
No se han hecho ofertas similares a los otros tres barcos y el Geo Barents, con 572 migrantes, y el Rise Above entraron a aguas italianas sin permiso pese a pedidos reiterados de puerto seguro. El Ocean Viking , con 234 migrantes, seguía en aguas internacionales, al sur del Estrecho de Messina.
“Hemos estado esperando 10 días por un lugar seguro para desembarcar a los 572 sobrevivientes”, dijo Juan Mattias Gil, jefe de misión del Geo Barents. El jefe de la operación, Riccardo Gatti, dijo que aparte de sufrir de infecciones cutáneas y respiratorias, muchos a bordo estaban estresados por el largo tiempo en el mar.