El secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, reprochó ayer que Estados Unidos no haga un esfuerzo para frenar el tráfico ilegal de armas a México, proporcional al que realiza el gobierno mexicano para controlar la introducción de fentanilo y precursores químicos a territorio estadunidense.
Aseguró que nuestro país padece “una pandemia de armas con diferentes grados de intensidad” y que en los últimos tres años el país ha detectado y asegurado en todos los estados armas introducidas de manera ilegal desde Estados Unidos.
Ebrard participó en la conferencia internacional El negocio de la letalidad: el tráfico de armas a México, organizada por El Colegio de México.
Del 1º de enero de 2020 al 22 de septiembre pasado, el gobierno federal ha incautado 55 mil 996 armas introducidas ilegalmente desde Estados Unidos. En el mismo periodo el gobierno estadunidense sólo ha decomisado 355 piezas de armamento que los traficantes pretendían pasar por la frontera.
“Con eso les digo todo. Esto es insostenible y no lo vamos a permitir”, expuso el canciller. Manifestó que el número de armas ilegales disponibles en nuestro territorio es mucho mayor, aunque no precisó la cifra.
“El esfuerzo que se tiene que hacer en Estados Unidos para frenar drásticamente el flujo de armamento es muy pequeño respecto al que aquí se tiene que hacer para controlar los precursores químicos y las drogas que llegan a Estados Unidos. Hay una desproporción de esfuerzos”.
Para el gobierno mexicano es prioritario frenar el flujo de armas que son traficadas desde la nación vecina, pues sin ello no se podrá reducir de manera sostenida la violencia en el país. Esas armas son las que equipan a los grupos criminales mexicanos, subrayó el secretario de Relaciones Exteriores.
Aunque hay acuerdos de cooperación en materia de seguridad entre los gobiernos de Andrés Manuel López Obrador y de Joe Biden, “pensamos que, en lo que va del siglo, en Estados Unidos no ha habido acciones importantes en esta materia”, añadió.
Ebrard expuso que México ha ofrecido incluso pagar la instalación de arcos detectores para que las autoridades estadunidenses refuercen sus medidas para controlar el tráfico de armas hacia territorio nacional.
Los tres municipios nacionales con más armas decomisadas son Tijuana, Baja California, con 3 mil 201 piezas; Ciudad Juárez, Chihuahua, con 2 mil 179, y Guadalajara, Jalisco, con mil 217.
Ebrard dijo que el armamento incautado proviene de todos los estados del país vecino, sobre todo de Arizona, Texas, Massachusetts, California y Connecticut.