Luego de su primera reunión, Raquel Buenrostro, titular de la Secretaría de Economía (SE), y Katherine Tai, representante Comercial de Estados Unidos, se comprometieron a continuar con las consultas en materia energética en el marco del Tratado México, EU, y Canadá (T-MEC), informó en un breve comunicado la dependencia mexicana.
La SE dio a conocer que en el encuentro virtual ambas partes también acordaron habilitar los grupos de trabajo entre los dos países, privilegiando el diálogo continuo: “La embajadora Tai y la secretaria Buenrostro acordaron tener una comunicación permanente para todos los temas de la agenda bilateral”.
Por su parte, la Oficina del Representante Comercial de Estados Unidos (USTR, por sus siglas en inglés) informó que Tai subrayó la importancia de avanzar rápidamente para abordar los problemas en el sector energético de México que EU identificó en su solicitud de consultas del 20 de julio.
Tras una serie de señalamientos tanto de empresas como de gobiernos por la política energética de México, en julio pasado EU y Canadá interpusieron una controversia argumentando que varias prácticas violan el T-MEC, favoreciendo a Petróleos Mexicanos y la Comisión Federal de Electricidad.
Lo anterior, llegó a decir Tai, afecta negativamente a las empresas estadunidenses que operan en México, poniendo en riesgo inversiones por 10 mil millones de dólares.
A partir de ese momento, comenzó un periodo en el que se establecieron consultas sobre el tema, el cual llegó a su fin el pasado 3 de septiembre. Este se extendió, pero los reclamantes pueden solicitar el establecimiento de un panel de solución de diferencias para examinar las medidas en cuestión y autorizar potencialmente acciones de represalia contra México.
Presión por el maíz
Según el comunicado de la USTR, Tai felicitó a Buenrostro por su reciente nombramiento, pero también resaltó la importancia de la relación económica de ambas naciones, por lo que, además del tema energético, recordó a la funcionaria mexicana la importancia de evitar una interrupción en las exportaciones de maíz de EU, por lo que pidió volver a un proceso de aprobación regulatoria basado en la ciencia.