Ciudad Juárez, Chih., Policías estatales de Chihuahua y municipales de Ciudad Juárez pusieron en marcha un operativo de vigilancia en la frontera de México con Estados Unidos para evitar que venezolanos intenten cruzar al país vecino y propicien un enfrentamiento con agentes de la Patrulla Fronteriza, como el ocurrido el lunes pasado, que dejó como saldo dos lesionados y un arrestado, informó César Jáuregui, secretario de Gobierno chihuahuense.
Recordó que alrededor de cinco mil personas oriundas de Venezuela han sido deportadas hacia Juárez desde El Paso, Texas, en las semanas recientes, e indicó que dos venezolanos “resultaron con heridas leves tras la trifulca que hubo (el lunes) entre integrantes del CBP” –siglas en inglés de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza estadunidense– y ciudadanos de la mencionada nación sudamericana. Además, sostuvo que en el incidente se usaron armas no letales.
Comentó que en Estados Unidos “las formas de detención son distintas a las nuestras, aunque lamento el uso de la fuerza pública”, y con las acciones para disuadir el paso de venezolanos al país vecino se pretende evitar nuevos hechos violentos.
Ayer por la mañana, la CBP informó que sus agentes debieron usar el lunes “balas de pimienta cuando un grupo de migrantes sin papeles intentaron ingresar a la fuerza y tiraron pedradas” a los uniformados.
En un comunicado, el organismo expuso que “el 31 de octubre, aproximadamente a las 12:20 horas”, venezolanos intentaron ingresar a territorio estadunidense sin documentos “mientras protestaban a lo largo” del río Bravo, “en el límite internacional cerca del centro de El Paso”.
Sostuvo que uno de los manifestantes agredió a un patrullero fronterizo “con una asta de bandera, momento en el que los agentes respondieron iniciando medidas de control de multitudes”, que incluyeron “el uso de la fuerza menos letal autorizada”, esto es, “bolas de pimienta”. Añadió que “la multitud luego se dispersó y regresó a México”.