Guadalajara, Jal. Las desapariciones de personas en Jalisco movilizaron este miércoles a cientos de manifestantes, desde un padre que fue a plantarse a las afueras de la Fiscalía del Estado para reiterar que fue personal de esa dependencia coludido con el crimen organizado el que se lo llevó a la fuerza hace un año, hasta alumnos y familiares de un profesor de educación física quienes señalaron que a una semana de su desaparición tampoco se ha hecho gran cosa por localizarlo.

Héctor Rodolfo Flores González, angustiado porque desde el 18 de mayo del año pasado su hijo del mismo nombre y de 19 años de edad fue sacado a la fuerza de un cuarto que compartía con su pareja embarazada por quienes se identificaron como personal de la Fiscalía, no sólo acudió a protestar a la Fiscalía sino a la Comisión Estatal de Derechos Humanos, defensoría de la que dijo tampoco ha podido impedir la serie de irregularidades y revictimización que ha sufrido desde que presentó la denuncia.

Narró que exactamente hace un año, a las 6:30 de la mañana, el grupo armado que se identificó como parte de la Fiscalía del Estado se llevó a su hijo y por fortuna no a su nuera, que ya dio a luz a un bebé que hoy tiene 6 meses de edad.

Cuando fue a denunciar dijo que lo que le informaron es que a su hijo se lo habían llevado detenido a Puente Grande, versión que él mismo desmintió cuando acudió al conjunto penitenciario y en todos los juzgados negaron que hubiera un proceso en contra del muchacho o que estuviera detenido.

Apenas el 9 de mayo pasado, casi un año después de la privación de su libertad, la Fiscalía informó al denunciante que su hijo no estaba encarcelado, pero sin mayor información y mucho menos alguna pista de su paradero.

Denuncia además que tiene temor por su seguridad, pues al haber denunciado que fueron agentes de la Fiscalía los que se lo llevaron, ha tenido amenazas, vigilancia de camionetas blancas o golpeteo en el portón de su casa por las madrugadas, con advertencias de que “le baje”.

También este miércoles se realizó una numerosa manifestación en la glorieta de los desaparecidos, donde cientos de madres de familia corearon que hacían falta ya 100 mil personas cuyo paradero se desconoce en el país, manifestación que sirvió de marco para enfatizar la serie de fallas de la Fiscalía Especial para Personas Desaparecidas porque no sigue los protocolos de búsqueda a los que legalmente tendría que atender.

También sirvió para que amigos, familiares y alumnos del profesor de educación física Rafael Omar Verástegui, pidieran resultados a las autoridades tras la desaparición del docente, el pasado domingo 16 de mayo luego de ser visto por última vez en Zapopan.