Tokio. El pesista venezolano Julio Mayora conquistó la medalla de plata en la categoría de hasta 73 kilos, la primera presea para su país en los Juegos Olímpicos de Tokio, en una prueba en la que el chino Shi Zhiyong batió su propio récord mundial para quedarse con el oro.

Shi, de 27 años y quien conquistó una dorada por segundos Juegos consecutivos, levantó un total de 364 kilos, uno más que el récord que había impuesto en el Mundial de 2019. El asiático se había subido a lo más alto del podio en Río 2016 en la categoría de hasta 69 kilogramos.

Mayora Pernía ocupó la segunda posición levantando 156 en el arranque y 190 en el envión para una marca total de 346 kilos, y el albano Briken Calja, con 341, completó el podio con el bronce en el Tokio International Forum.

“Estoy alegre y satisfecho con esta medalla”, dijo Mayora envuelto en una bandera venezolana. “Fue una competencia muy buena. Mis respetos a Zhiyong, pero yo también soy guerrero. Y creo que puedo ganar en París 2024”, retó el pesista, de 25 años, quien recibió la feli-citación vía telefónica del presidente de su país, Nicolás Maduro.

En el rugby 7 varonil, la selección de Argentina se hizo con el bronce al derrotar a Gran Bretaña por 17-12, ofreciendo a su país su primera presea en los Olímpicos.

Oro para Fiyi

Fiyi derrotó 27-12 a Nueva Zelanda y se adjudicó el oro, reteniendo así el título que ganó en Río de Janeiro.

Los Pumas 7, que habían perdido unas horas antes en semifinales contra Fiyi por 26-14, se tomaron la revancha contra el equipo británico, que los había eliminado en cuartos de final en Río 2016.

El equipo estadunidense de Stefanie Dolson, Allisha Gray, Kelsey Plum y Jackie Young ganó su primera medalla dorada en el nuevo deporte olímpico de basquetbol 3x3. Plum anotó cinco puntos temprano para ayudar a su conjunto a tomar la punta, en una victoria de 18-15 sobre la escuadra del Comité Olímpico Ruso.

Plum, líder en puntos en la historia del baloncesto universitario estadunidense, encabezó a las anotadoras en el torneo olímpico, con 55 unidades en el certamen de cinco días. Estados Unidos jugó nueve partidos y solamente perdió uno.

El torneo no fue tan fluido como se esperaba y mientras más se acercaron a las medallas, los equipos apretaron la presión.

En la final varonil, Karlis Lasmanis anotó desde detrás del arco para sellar una victoria de 21-18 sobre los rusos que le dio a Letonia su primer metal en los Juegos Olímpicos de Tokio.

Las medallas de bronce fueron para China, que se impuso a Francia 16-14 en la femenil, y Serbia venció 12-10 a Bélgica por el tercer lugar varonil.

El ciclista esloveno Primoz Roglic se convirtió en el nuevo campeón olímpico de contrarreloj, en una prueba disputada al pie del Monte Fuji y en la que el colombiano Rigoberto Urán acabó en plaza de diploma olímpico (8º).

Sobre un trazado muy exigente alrededor del circuito automovilístico Fuji Speedway, Roglic recorrió los 44.2 kilómetros de la prueba en 55:04.19, relegando a 1:01.39 al holandés Tom Dumoulin y 1:03.90 al australiano Rohan Dennis, que completaron el podio.

Sin ser un especialista en esta disciplina y teniendo que sustituir a Daniel Martínez, el campeón colombiano de contrarreloj que no viajó a Tokio al no haberse recuperado del coronavirus, el veterano Urán cumplió de manera más que digna, acabando octavo (a 2:14.50 del vencedor de la prueba), después de haber liderado la clasificación durante casi media hora.

En la contrarreloj femenil, Annemiek van Vleuten concretó una dominante victoria, cobrando cierta venganza luego de los problemas de comunicación que le costó el oro en la prueba de ruta el fin de semana pasado. La holandesa llevaba ventaja de más de seis segundos en el primer parcial y lo aumentó a más de 28 antes de terminar la prueba en 30:13.49 minutos.

La suiza Marlen Reusser finalizó en segundo lugar a más de 56 segundos de distancia, y la compatriota de Van Vleuten, Anna van der Breggen, se quedó con el bronce.

Alemania volvió a subir a lo más alto del podio de doma olímpica individual después de 25 años, con oro y plata, al superar Jessica von Bredow-Werndl a su famosa mentora y compatriota Isabelle Werth, que quedó en segundo lugar.

La británica Charlotte Dujardin, triunfadora en 2012 y 2016, tuvo que conformarse con el bronce.

La judoca japonesa Chizuru Arai, bicampeona del mundo, se impuso en la categoría femenina de hasta 70 kilos al superar en la final a la austriaca Michaela Polleres. La holandesa Sanne van Dijke y la rusa Madina Taimazova ganaron las medallas de bronce.

En la prueba masculina de hasta 90 kilos, el georgiano Lasha Bekauri se hizo con el metal áureo, al vencer al alemán Eduard Trippel. Davlat Bobonov, de Uzbekistán, y Krisztian Toth, de Hungría, se llevaron los bronces.

En la esgrima, el equipo sudcoreano, formado por Kim Junghwan –quien logró el bronce también en la competición individual–, Oh Sanguk y Gu Bongil, ganó la final de sable masculino ante los italianos Luca Curatoli, Aldo Montano y Enrico Berre (45-26).

Hungría, liderada por el triple campeón olímpico Aron Szilagyi, consiguió el bronce al vencer por 45 a 40 a Alemania.