Valencia, España. 30 de octubre de 2024. La devastación se extendió en la zona de Valencia y de Castilla-La Mancha, donde las lluvias torrenciales causaron la muerte de al menos 95 personas, cifra provisional y que se espera que aumente con el paso de las horas, además de decenas de personas desaparecidas y abundantes daños materiales. El estupor ante la magnitud de la tragedia provocó la suspensión casi total de la actividad política y parlamentaria en señal de respeto por los fallecidos durante el desastre natural.
El fenómeno natural llamada Depresión Aislada en Niveles Altos (DANA), también conocida como “gota fría”, es la peor en décadas en la región de Valencia, donde se recuerda un desastre similar en 1957, cuando se desbordó la cuenca hídrica y provocó la inundación de valles y ciudades causando más de 300 muertos.