Noboa, ganador
de la elección en Ecuador
aniel Noboa el año pasado ordenó asalto a la embajada de México en Ecuador; ahora en las elecciones presidenciales ha violado la ley flagrantemente mientras el Consejo Electoral Nacional cerró los ojos.
El fraude de Noboa –protegido de Trump– ha sido descarado; decretó el estado de excepción en siete provincias donde perdió la primera vuelta, suspendiendo los derechos civiles de inviolabilidad de domicilio, la libertad de tránsito y reunión.
El CNE cambió de lugar a última hora 28 recintos electorales donde Noboa perdió en febrero. Violó la ley en el momento de silencio electoral en las cadenas gubernamentales emitiendo anuncios cuatro veces al día sobre logros
del gobierno.
Es declarado ganador
en las elecciones con 11 puntos arriba de Luisa González, mientras existen más de 3 mil actas inconsistentes.
Es un escándalo, pero su gobierno está apoyado por Washington. Daniel Noboa ha autorizado el ingreso de militares de Estados Unidos a su territorio, les ha entregado las islas Galápagos y piensa reabrir la base de Manta.
¡El pueblo de Ecuador que tanto se ha movilizado en el pasado tiene la última palabra!
Pablo Moctezuma Barragán
La pasión y disciplina de Mario Vargas Llosa
La concesión del Premio Nobel a quien lo más importante que le pudo suceder en la vida haya sido aprender a leer, fue el conmovedor ejemplo de lo más alto que puede alcanzar una vida consagrada, en la disciplina, a la sensible pasión por una vocación literaria, en la comprometida y abnegada dedicación total del mejor tiempo posible a lo que le es lo más importante: escribir.
La disciplina nunca podrá suplir al talento, pero ninguna gran obra puede crearse sin ella. Mario Vargas Llosa, en su relación conyugal con la literatura, encarnó la fiel perseverancia que derrota la inseguridad y hace brotar ese latiente talento, forzando en la búsqueda de la palabra justa que llene de eufonía, la construcción del genio.
Verdadero liberal, valiente crítico, ejemplo de la entereza en la defensa de la libertad y la convicción de las ideas. Último heredero de la novela del siglo XIX, al escribir aún con tinta, será el último escritor mayor que nos legará manuscritos, esa noble confesión de su disciplinada pasión que seguirá reluciendo como un sensible monumento de la resistencia del individuo con su literatura.
Luis Gutiérrez
Donald Trump es un émulo de Hitler, opina
Es claro que el pueblo estadunidense apoya incondicionalmente a Trump en sus supuestas locuras; más bien, esas supuestas locuras corresponden a un plan bien definido, que tiene por objetivo empobrecer a las naciones para dominarlas por medio del mercado, ya que por la fuerza militar todo indica que no lo puede hacer.
De esta forma, impone unilateralmente los aranceles a diestra y siniestra, ya sea en Latinoamérica, Europa o Asia, no importando que sea aliado o no.
En su visión neonazi no le importa perjudicar a su propio pueblo y, por ende, menos le va a importar empobrecer a otros pueblos.
Si no fuera un plan de dominación, este individuo hubiera golpeado a los países latinoamericanos cuyos presidentes no le son sumisos, pero no, golpeó a todos y ahora quiere negociar, pero esas negociaciones tienen un problema de origen: que el agresor es quien impuso el tema y forma de negociar y, de esa manera, no les queda a los otros países más que hacerlo en las peores condiciones.
El gobierno de México fincó sus bases de producción en un modelo dependiente del mercado estadunidense y muchos países más hicieron lo propio, pero ya sea de Latinoamérica, de Europa, Asia o África, todos tienen una fuerte dependencia del capital y del mercado estadunidense.
Según mi entender, el presidente de Estados Unidos no está loco o desquiciado, más bien es un émulo de Hitler, pero ahora con la bandera del país vecino del norte, y debemos prepararnos para tratarlo como tal.
Francisco Muñoz Apreza
Defienden la libertad de expresión en UNAM
El Consejo Universitario de la UNAM aprobó y desaprobó el artículo 15 del reglamento del Tribunal Universitario que sancionaba el vandalismo de profesores y estudiantes (por definición, las autoridades no cometen vandalismo).
Ante esto, cabe preguntarse qué tan represivo era ese artículo, que ni siquiera llegamos a conocerlo porque nunca fue publicado en la Gaceta.
Los estudiantes siempre han defendido a la UNAM con la protesta; lo hicieron hace 25 años, cuando estallaron la huelga más larga en contra de la privatización de la universidad, lo que demuestra que el Consejo Universitario no siempre toma las mejores decisiones y visibiliza su falta de independencia frente a la rectoría.
En lo personal, participé en las huelgas de 1986, contra la privatización; en 1997 contra el cambio del Plan de Estudios del CCH, como profesor que desapareció dos turnos, y en la huelga de 1999.
De no ser por la protesta de los estudiantes, tal vez, mucha gente pobre no habría estudiado ni estaría estudiando en estos momentos.
Emilio Vivar Ocampo