Demandan solución a las autoridades

Miércoles 2 de abril de 2025, p. 29
Tepic, Nay., Más de 500 familias, cuyas viviendas colindan con el cerro de La Cruz, en el norte de esta capital, están en riesgo de padecer un deslave debido a la extracción de materiales que se realiza durante 12 horas diarias.
En protesta por esta situación, ayer en la mañana un grupo de vecinos, la mayoría mujeres, impidió la entrada y salida de camiones de volteo. Señalaron que a pesar de que ya han denunciado esta problemática ante autoridades municipales y estatales, nadie les ha respondido.
Los manifestantes se protegieron con sombrillas por el intenso sol, y se apostaron a la entrada y salida de la brecha por la cual circulan los camiones de materiales; además, cerraron puertas hechas con malla.
Expusieron: nos preocupa que se nos vaya a venir el cerro encima en temporada de lluvias. Quienes habitan aquí se han dado cuenta de ello. Si no paran la obra, nosotros nos vamos a ver en la necesidad de tapar mañana la calle
, advirtió Mayra Bernal Rubio, presidenta de la colonia Reforma.
Ahorita estamos pacíficamente, porque no queremos perjudicar a los trabajadores de las combis y de los camiones, por eso lo hicimos así
, apuntó. La inconforme reprochó que nadie les avisó de la obra efectuada en la parte alta del cerro, o si sólo se extrae material pétreo para llevarlo a algún otro lado.
Dijo ignorar quién o quiénes hacen estas labores y para qué están destinadas; destacó que al lado del cerro se encuentran un jardín de niños, una primaria y la cancha de usos múltiples de la colonia, lo que incrementa el número de probables víctimas en caso de un derrumbe.
Vecinos alertaron que no sólo el sector Reforma –conocido igualmente como La Taberna– resultaría perjudicado, sino también la colonia Las Conchas.
Personas que apoyaron el cierre de los trabajos sostuvieron que todos los días, sus casas se estremecen por la intensa vibración de las máquinas en la parte alta de la colina, y además ya han ocurrido derrumbes en los patios de casas, lo que incrementa el miedo a un deslave potente que podría sepultar a familias.
Esta problemática no es nueva para quienes habitan a las faldas del cerro; sin embargo, todos reconocen que hace más de 15 años esa área se mantenía sólida, sin problema alguno de desgajamientos.
Recordaron que ha habido quienes llegan a vivir a la colonia, de repente ponen en venta la propiedad y se retiran a vivir a otra zona, luego que han caído piedras o algo de tierra en sus patios, lo que a su ver implica un aviso de que algo más grave pudiera pasar.
Añadieron que si por alguna razón alguien renta una vivienda, hay pocos interesados, pues temen que haya un derrumbe mayor. Cuando una casa de esas, de las que están pegaditas (al cerro) se pone en venta, se tardan muchísimo en salir porque pues quién quiere morir cuando estás lavando la ropa, aseando el patio o durmiendo
, comentó una de las vecinas que participó en la protesta.