
Viernes 21 de marzo de 2025, p. 4
Teuchitlán, Jal., La fiscalía de Jalisco aún no entrega a la Fiscalía General de la República (FGR) el expediente del rancho Izaguirre, y el presunto centro de exterminio
que operaba en ese lugar el cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), porque, argumenta, no ha concluido sus peritajes.
En el predio hay siete puntos de investigación que sólo están delimitados con cintas amarillas. En muchas de esas áreas, los banderines de colores que señalan los sitios a explorar están a ras de tierra, en espera de que los especialistas los intervengan.
Esto, aunque se supone que desde septiembre de 2024 se habían iniciado las indagatorias y el inmueble ha estado asegurado por autoridades locales. Pero ayer, nadie trabajaba en labores periciales.
Los restos óseos humanos, ropa, documentos oficiales como identificaciones para votar, zapatos y otros objetos que aparecieron, ya no estaban en el lugar. Presuntamente, los servicios periciales de la fiscalía estatal los trasladaron para su análisis al Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses, que se encuentra a 80 kilómetros de distancia, en Tlaquepaque.
El rancho Izaguirre está ubicado a 60 kilómetros de Guadalajara y fue parte de un núcleo ejidal hasta 2020. Los grupos de madres buscadoras consideran que ahí se materializó la desaparición y homicidio de hombres y mujeres de los que ya no se sabe nada desde hace algunos meses o incluso años, y que vivían en entidades como Zacatecas, Colima, Nayarit o Jalisco.
La propia fiscalía de Jalisco confirmó la información de fuentes federales respecto a que la FGR continúa sin hacerse cargo de las indagatorias y tampoco ha participado en los peritajes que se han llevado a cabo en los últimos 15 días.
Y fue por ello que ningún funcionario ministerial federal de alto nivel estuvo ayer presente en la visita al rancho al que la víspera la FGR dijo que permitiría a medios de comunicación.
Sin embargo, la fiscalía local convocó también a grupos civiles; un recorrido al que acudieron unas 300 personas.
Se esperaba que algún fiscal federal anunciara ayer mismo la atracción oficial del caso y el arranque de los análisis forenses y periciales por parte de la Agencia de Investigación Criminal (AIC) de la FGR, pero nadie acudió.
Apenas ayer, la Fiscalía de Jalisco envió un oficio a la FGR para solicitarle analizar si pudiera atraer el caso. Una vez que el Ministerio Público Federal responda formalmente si acepta, la autoridad local comenzaría la entrega de sus indagatorias.
Sólo que hay un problema: cada banderín colocado en el piso de tierra del rancho Izaguirre, cada hoyo de entre 60 centímetros y un metro de diámetro abierto en el piso –que se considera que fue excavado para inhumar y destruir los restos de las víctimas–, primero tiene que ser pericialmente desahogado por el Ministerio Público local, según indicaron funcionarios federales.
La fiscalía de Jalisco publicó en su cuenta de X la imagen de un oficio entregado a la delegación de la FGR. El documento dice que a las 13.25 horas, minutos después de que grupos de madres buscadoras calificaran su visita al rancho Izaguirre de circo
, la autoridad local entregó la petición de que el órgano federal considere
la viabilidad de atraer las investigaciones del caso Teuchitlán.
El miércoles pasado, el fiscal estatal, Salvador González de los Santos, expuso que por recomendación y en acuerdo con el gobernador Pablo Lemus
, ese mismo día entregaría todo el expediente
a la FGR para que atraiga la investigación
, lo cual no ocurrió. La fiscalía local siguió a cargo del caso y fue responsable de la fracasada logística para la visita de colectivos y medios de comunicación al lugar.
En el oficio FE03014932025DL con asunto Se propone ejerza la facultad de atracción
, dirigido a la FGR, la fiscalía estatal argumenta que debe trasladarse la responsabilidad de la indagatoria para considerar los posibles delitos e hipótesis que correspondería investigar a la instancia federal, a fin de continuar con las investigaciones imparciales y objetivas de los hechos
.
El mismo miércoles, el fiscal estatal propuso instalar en conjunto con el gobierno federal una comisión de la verdad
.
Pero ayer, durante la visita se pudo observar que sólo dos personas utilizaban uniformes de peritos forenses y que la bodega en que se encontraron múltiples evidencias está ocupada como espacio para los funcionarios locales.
Y aunque se dijo que ya todas las evidencias habían sido recolectadas, en el sitio todavía se pudieron observar una mochila, un rastrillo, un cepillo de dientes, dos calcetas y otros objetos sin ninguna medida que garantice su custodia.
El predio no tuvo ayer actividad forense y la responsabilidad para su esclarecimiento sigue hasta hoy en manos de la fiscalía de Jalisco.