Cuernavaca, Mor., La Procuraduría Federal de Protección al Medio Ambiente (Profepa) clausuró la construcción de una casa-habitación de 140 metros cuadrados ubicada en el paraje Cuaucuahtla, de la comunidad indígena de San Juan Tlacotenco, municipio de Tepoztlán, por estar ubicada dentro del polígono del área nacional protegida (ANP) Parque Nacional El Tepozteco y por carecer de autorización de impacto ambiental, informó la dependencia.

La edificación serviría para la operación de un hotel cinco estrellas, denunciaron el presidente de Bienes Comunales, Félix Cuevas Medina, y Maximiliano Valencia, del poblado indígena.

En un comunicado, la Profepa especificó que la construcción se desarrollaba en un terreno de unos 3 mil metros cuadrados; además “hay vegetación forestal arbustiva, entre bosque de encino y selva baja caducifolia; además, para la obra se removió vegetación y se abrió una brecha de acceso.

Durante la visita de inspección, dijo la Profepa, se solicitó la autorización de impacto ambiental expedida por la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales, pero el responsable del sitio no presentó ningún documento, por lo que se decretó una clausura total temporal de toda actividad.

La colocación de la lona con la leyenda clausurado fue el 5 de marzo, y los habitantes expusieron que dicha acción coincidió con la notificación de la admisión de la denuncia que presentó ante la dependencia el comisariado de Bienes Comunales de Tepoztlán.

Explicaron que la queja presentada el 11 de diciembre de 2024 se fundamentó en el artículo 190 de la Ley General de Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente, y fue contra quien resulte responsable por las obras de construcción realizadas en el paraje Cuacuahtla.

Félix Cuevas señaló también que la obra no cuenta con permisos del ayuntamiento de Tepoztlán; de ahí que en la asamblea comunal del 25 de febrero pasado, se determinó, mediante usos y costumbres, clausurar la obra de manera simbólica; aunque los trabajos siguieron.

En su afán por parar la obra, los pobladores acudieron a inspeccionarla y se encontraron a integrantes de la familia Rojas Arévalo, quienes amenazaron de muerte a Cuevas Medina, y otras ex autoridades comunales.

Los inconformes sostienen que Ezequiel Rojas, originario de San Juan, es el prestanombres, de una mujer extranjera que ordenó la construcción del hotel, en tres hectáreas de terreno comunal, ubicadas afuera de San Juan, en la parte más alta y dentro de la ANP El Tepozteco.

Los representantes del comisariado esperan que dicha clausura sirva de ejemplo para que se detengan otras cimentaciones que se realizan en los campos de cultivo, a las faldas de las lomas y algunos cerros del parque nacional El Tepozteco, que es también parte del corredor biológico Chichinautzin.

Venta irregular: el negocio

El ex comisariado de Bienes Comunales, Lucio Cuevas Romero, aseguró que Tepoztlán arrastra un historial de venta irregular de tierras desde hace muchos años. Como fue el caso del club de golf entre 1994 y 1995, al que se opusieron porque los terrenos son de uso agrícola, no para complejos turísticos o residencias de descanso.

Hay un antecedente sobre la venta de predios, y que muchas personas en los poblados tratan de hacer lo mismo, y eso nos lleva a una problemática ambiental en donde sí se compromete la zona natural protegida, explicó.

Señaló que las nuevas viviendas requieren de fosas sépticas, y eso trae como consecuencia la filtración de desechos a los mantos freáticos, lo que repercute en la calidad del agua de la parte baja de Tepoztlán.