El Banco de México (BdeM) está concentrado en cumplir la meta de inflación de 3.0 por ciento para el 2025 en medio de la volatilidad  e incertidumbre que han generado las declaraciones del gobierno de Estados Unidos respecto a la imposición de aranceles, destacó Galia Borja, subgobernadora del Banco de México.

Al participar en el evento Mujeres a destacar en la banca, trayectorias que dejan huella, organizado por la Asociación de Bancos de México (ABM), la subgobernadora fue interrogada sobre los efectos que genera el gobierno de Estados Unidos con sus diversas declaraciones sobre los aranceles a las exportaciones y su entrada en vigor. Respondió que lo que provocan es incertidumbre.

En cuanto a la posibilidad de que se genere una recesión si se mantienen los aranceles por un periodo largo, comentó que habría que saber en qué productos se aplicarán.

Estamos inmersos en esta negociación y en estas definiciones y no hay que adelantarnos a las mismas, manifestó.

Galia Borja fue interrogada sobre el impacto que podría tener en la inflación la aplicación de aranceles, a lo que respondió que el mandato constitucional que tiene el Banco de México es muy claro y consiste en mantener una inflación baja y estable.

Entonces en la medida en que las condiciones afecten o apoyen a una menor inflación como lo hemos visto en los últimos meses, es que tomaremos nuestras decisiones, aseguró.

Ahora vemos que la inflación está en el rango de variabilidad que tenemos en el Banco de México, no ha llegado a la meta, y el esfuerzo que tenemos que hacer es que llegue a la meta de 3 por ciento. En eso estamos trabajando y creemos que por eso se necesita tener una postura todavía restrictiva, pero la misma la estamos calibrando debido a la desinflación que hemos visto.

En enero, la inflación general fue de 3.59 por ciento anual, mostrando una disminución desde 4.21 por ciento en diciembre. La inflación subyacente mostró un ligero aumento, llegando a 3.66 por ciento anual, desde 3.65 por ciento en el mes anterior.

Por otra parte, el BdeM publicó el 20 de febrero que podría seguir recortando la tasa de interés en futuras reuniones de política monetaria y considera ajustarla en magnitud similar a la última reducción de medio punto porcentual a 9.50 por ciento.