Domingo 2 de marzo de 2025, p. 21
Veracruz, Ver., Pablo Ortigoza, estudiante de 19 años y boxeador amateur, fue asesinado por un policía municipal de Fortín de las Flores, en el centro del estado. El viernes, el joven caminaba rumbo a su domicilio en la colonia Ricardo Ballinas, cuando policías a bordo de una patrulla le marcaron el alto, pero presuntamente por temor de ser incriminado injustamente decidió no detenerse, señalaron sus amigos en redes sociales.
Ante ello, un oficial bajó de la unidad y le disparó. Sin embargo, los compañeros del uniformado lo detuvieron, sometieron y pusieron a disposición de las autoridades para que se defina su situación jurídica.
Amigos y familiares exigen justicia, piden que el homicidio no quede en el olvido, esperan que la Fiscalía General del Estado realice su labor y el asesino pague.
En redes sociales compartieron que Pablo “estudiaba la universidad, trabajaba para pagar sus estudios y además era boxeador aficionado. Le arrebataron la vida anoche a unos metros de llegar a su casa por la mala actuación de los elementos policiacos en esas ‘revisiones de rutina arbitrarias’ que tiene nuestro municipio. Descanse en paz nuestro compañero y amigo y le deseamos pronta resignación a su familia ante esta injusticia.
Te vamos a extrañar, hermano, y nos vas a hacer falta a todos los que te queremos”, comentaron sus conocidos en redes sociales.
El caso de Pablo es sólo uno de los tantos abusos policiales que agentes estatales y municipales han cometido contra ciudadanos en la entidad.
El 19 de enero de 2024, pobladores quemaron el palacio municipal de Lerdo de Tejada e intentaron linchar a policías de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), pues un joven de la localidad fue ejecutado presuntamente por un elemento de la corporación.
En junio de 2024, elementos de la Fuerza Civil abrieron fuego en contra de manifestantes de Totalco, Perote; dos personas perdieron la vida por la agresión. Ese mismo mes, locatarios del mercado municipal de San Andrés Tuxtla acusaron que un integrante de la corporación municipal de seguridad mató a un hombre que protestaba por una remodelación en la zona.
El 17 de julio de 2024, Inocencio Vázquez Rivas falleció luego de que fue levantado y golpeado por policías preventivos del ayuntamiento de Banderilla.
También en noviembre de 2024, un integrante de la SSP, ejecutó a un habitante de Las Choapas, lo que generó protestas contra los uniformados.