Tapachula, Chis., Migrantes de dos caravanas, una que partió el 20 y otra el 26 de enero, avanzan por la costa de Chiapas en su afán por salir de la frontera sur y llegar a la Ciudad de México; algunos extranjeros no pierden la esperanza de poder cruzar a Estados Unidos.

Un contingente llegó ayer al municipio de Escuintla y el segundo avanzaba de Mapastepec hacia Pijijiapan, informaron los propios extranjeros.

La incertidumbre prevalece en ambos grupos, que se enteran de las deportaciones masivas de Estados Unidos hacia países como Guatemala, Colombia y México, y porque a diferencia de contingentes anteriores que pedían un permiso de tránsito por el país, ahora sólo quieren que les permitan avanzar.

Vamos con mucho cuidado, pero también con mucha fe; por ahora sólo queremos salir de aquí (de Chiapas), porque no hay trabajo; vamos a ir a la Ciudad de México a buscar empleo, y esperar un tiempo a ver qué pasa, si algo cambia en Estados Unidos; ya hay demandas en favor de los migrantes, comentó la venezolana Teresa Cristán.

Antony Torres, de Cuba, consideró que el viaje es una apuesta, como puede ganar y lograr cruzar la frontera norte, como puede perder y quedarse en México, pero vale la pena intentarlo. En Cuba está todo mal; no hay comida, no hay medicamentos, estamos lejos de la familia; es triste, es difícil, pero esto es como la lotería, si no intentamos no sabemos qué puede pasar, expresó el hombre que viaja con un hermano y amigos.

Hasta ahora, ni el Instituto Nacional de Migración ni la Guardia Nacional han hecho algún intento de detener el éxodo de las personas.