Diversas agrupaciones celebraron la liberación de María Fernanda (Mafer) Turrent, quien sufrió violencia familiar y vicaria ejercida por su ex pareja. El Frente Nacional de Mujeres destacó: por fin un parteaguas a favor de las mujeres y la justicia, y demandó que ahora se investigue y se castigue a quienes hicieron de la impunidad y el influyentismo una forma de trabajo y persecución.

La colectiva Las Brujas del Mar exigió que su liberación se extienda a vivir una vida libre de violencia para ella y sus hijos, que haya garantías de no repetición, que el padre sea investigado y juzgado por las autoridades correspondientes y que haya reparación del daño y medidas cautelares efectivas.

Denunció el caso de Carmen, otra madre víctima de violencia vicaria detenida por el mismo motivo en Durango, cuando tiene poco de haber dado a luz y seguía recuperándose de su cesárea. Mafer, afortunadamente ya está en libertad, pero Carmen sigue detenida.

Arussi Unda, vocera y cofundadora de Las Brujas del Mar, dijo a este diario que existen grupos de hombres organizados, entre ellos agresores vicarios y deudores alimentarios, que crean agrupaciones o páginas en las que enlodan la reputación de sus ex parejas.

Tienen muchos recursos y han querido proponer iniciativas de ley dizque para proteger a los hombres de las mujeres, lo que está inspirado en una gran misoginia.

Por separado, Édgar González, ex esposo de Mafer, aseguró que no hubo violencia en su relación ni hacia sus hijos, sólo desacuerdos, discusiones y tensiones, como ocurren en muchas parejas, pero tomaron terapia y resolvieron esos problemas.

Afirmó que su único interés es garantizar el bienestar de sus hijos y promover una convivencia sana con ellos, como se acordó en el pacto inicial, por lo que espera que en los próximos días los abogados de ambas partes lleguen a un acuerdo que permita cerrar este capítulo.