Chilpancingo, Gro., La Coordinadora Estatal de Ejidos y Comunidades de Guerrero anunció que este año, los agricultores de la entidad y el país “vamos a exigir más apoyo al campo, que los presupuestos autorizados lleguen directamente a los beneficiarios, para que se reactive el sector.

Dijo que no es posible que el Congreso local sólo les haya otorgado un pírrico presupuesto del 0.34 por ciento (293.6 millones de pesos); asignó tres veces más (881 millones de pesos) al DIF, que sólo regala despensas, colchones y cobertores, y eso no se vale, advirtió Arturo García Jiménez, asesor de esa organización campesina.

Expuso que del Presupuesto de Egresos 2025, van al Poder Ejecutivo 45 mil 265.1 millones de pesos; al Legislativo, 890.1 millones; al Judicial, mil 30 millones; a los órganos autónomos, 5 mil 663.9 millones; al sector paraestatal, 5 mil 852.9 millones; para municipios, 19 mil 882.7 millones, y a provisiones salariales y económicas, 4 mil 479.3 millones.

Entrevistado por teléfono, García Jiménez anunció que hoy se llevará a cabo en el Museo de la Ciudad de México el foro de consulta Los ejidos y las comunidades agrarias en el segundo piso de la 4T, rescate, defensa y revalorización, en el cual se abordará el tema rural y agrario.

Estrategia propia

Vamos a participar campesinos y productores de todo el país para decir cómo vemos la situación y qué es lo que vamos a hacer, adelantó.

Consideró que lo más importante es que “los labriegos organizados construyan su propia estrategia de soberanía y de autosuficiencia alimentaria, porque de lo contrario, este país no va a caminar; el gobierno federal debe fomentar esas iniciativas campesinas, porque tenemos que ser autosuficientes.

“Que en cada región, en cada comunidad y en cada familia, la gente construya capacidades para ser autosuficientes; no esperamos mucho del gobierno, porque los presupuestos son muy marginales.

Lo que pasa en el campo tiene que ver con las políticas públicas, la pobreza y el comportamiento de los mercados. La propuesta de soberanía y autosuficiencia alimentaria es lo que vamos a seguir señalando, porque no se puede marginar ni dejar de apoyar a quienes dan de comer a este país, subrayó.

Apuntó que en el caso de Guerrero persiste la actividad social en donde la gobernanza se da a través de los comisariados ejidales y comunales, ahí está la diversidad de nuestro estado. El Presupuesto de Egresos que aprobó el Congreso local fue de más de 83 mil millones de pesos, pero al campo se le designó apenas 0.34 por ciento. Esto significa que no hay interés en sacarlo adelante. Y en su rubro de ingresos están los subsidios al fertilizante y el programa Sembrando Vida, que suman casi 7 mil millones de pesos.

Remesas, fuerte del campo

El asesor de la Coordinadora Estatal de Ejidos y Comunidades de Guerrero recordó que lo fuerte para el agro de la entidad “son las reme-sas de nuestros paisanos en Estados Unidos, que representan más o me-nos el presupuesto estatal, algo así como 63 mil millones de pesos; hay que imaginarnos lo que pasaría si ese flujo de dinero se cortara, pues el campo se secaría totalmente.

Lo más preocupante de todo esto es que la actividad agropecuaria va disminuyendo, porque sin esas remesas y los subsidios externos, la producción es marginal; investigadores de Universidad Nacional Autónoma de México nos dicen que 60 por ciento del ingreso en la economía campesina es por actividad no agropecuaria, o sea, las remesas.

Arturo García advirtió que, al menos en Guerrero, es muy grave la situación del campo “con los huracanes, los problemas de suelo, de precios, de venta; el Programa de Precios de Garantía fijó en 6 pesos el kilo de maíz, siendo que el año pasado se pagó en casi ocho.

Todo eso hace que deje sin sentido la actividad agropecuaria. A nivel nacional, la Sader (Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural) prácticamente tiene el mismo presupuesto que el año pasado, y lo que se va a hacer será menor a lo que se hizo en 2024; entonces, no vemos un cambio sustancial en el impacto del gobierno.

Comentó que cada tres dólares que entran al país de exportaciones agrícolas son por el aguacate pero, ¿qué pasa con los productores de maíz, trigo, frijol y arroz? Pues está por los suelos la producción debido a la sequía y a los altos costos de control, se cayó la cosecha de granos y de oleaginosas.

Abundó: “Si hablamos del Programa de Producción para el Bienestar de la Sader, a cada productor beneficiado le tocan 17 pesos al día; no se puede decir que ése sea un apoyo verdadero al campesino, y no se quiere decir que se desprecia el dinero, pero si hablamos de que hay que reactivar el campo, con eso no se reactiva.

Por eso, no se puede hablar de que el país está tranquilo, el campo no se va a colapsar, está colapsado desde hace décadas; hay un abandono del territorio rural por parte de los tres niveles de gobierno, puntualizó.