Riesa. Miles de personas se manifestaron el sábado contra una convención del partido de ultraderecha Alternativa para Alemania (AfD), bloqueando algunas carreteras y retrasando el inicio de la reunión en Riesa, mientras los partidos inician sus campañas para las elecciones, que se celebrarán el próximo mes.

La AfD eligió a Alice Weidel como su candidata a canciller federal, mientras los socialdemócratas hicieron lo propio con Olaf Scholz.

Weidel, colíder de la organización ultraderechista –quien esta semana mantuvo una charla en directo en X con el multimillonario de la tecnología Elon Musk, que respalda a su partido– agradeció a los delegados por desafiar a la turba de izquierda y llegar hasta aquí.

Las encuestas de intención de voto ubican a AfD con 20 por cien-to de apoyo; con 30 por ciento, el bloque conservador opositor, la Unión, y su candidato Friedrich Merz, es favorito a la cancillería.

La Unión se centra en impulsarla estancada economía alemana y reducir la migración irregular.

Widel llamó a cerrar las fronteras de Alemania a la migración no autorizada y realizar deportaciones masivas de solicitantes de asilo, dejando claro que no tiene problema con el término remigración, que conlleva una fuerte carga política.

Merz ofrece un cambio fundamental en su propio partido, después de que colapsara la impopular y notoriamente dividida coalición de centroizquierda del canciller Olaf Scholz.

En tanto, los sondeos muestran un apoyo a los socialdemó-cratas de entre 14 y 17 por ciento.El gobierno de Scholz colapsó en noviembre, cuando despidió a su ministro de Finanzas por una disputa sobre cómo revitalizar la economía, llevando a una elección anticipada.

Scholz admitió el sábado que se cometieron errores y que quizás también debería haber terminado la coalición antes. Pero señaló que es hora de mirar hacia el futuro. Luchemos, instó a los delegados en una convención del partido en Berlín, que confirmó formalmente su nominación como su candidato en una votación a mano alzada.

Scholz, quien hizo de Alemania uno de los principales proveedores de armas a Ucrania, pero se negó a enviarle misiles de crucero de largo alcance Taurus, afirmó que mantendría su postura firme y prudente.