Caracas. El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, repudió ayer el llamado del ex presidente de Colombia Álvaro Uribe a la intervención militar en Venezuela y lo llamó triste personaje paramilitar y narcotraficante. Asesino criminal. Cobarde; Ven tú al frente de las tropas. Te espero en el campo de batalla, cara a cara, no mandes a otro, declaró durante su participación en la clausura del Festival Mundial de la Internacional Antifascista por un Mundo Nuevo.

Horas antes, Uribe, pidió una mediación internacional en Venezuela para sacar del poder a Maduro preferiblemente avalada por Naciones Unidas, que desaloje a esos tiranos del poder y convoque de inmediato a unas elecciones libres, mientras participaba en un acto con precandidatos presidenciales de su partido Centro Democrático en Cúcuta, Colombia, en el que manifestaron su apoyo a la oposición venezolana en un plantón por la libertad de ambos países, informó Deutsche Welle.

Por otra parte, el gobierno del presidente de Brasil, que no ha reconocido oficialmente la victoria de Maduro, pero envió a su embajadora en Caracas a la investidura, señaló que aunque observamos los gestos de distensión por parte del gobierno de Maduro, como la liberación de mil 500 detenidos en los recientes meses (...), Brasil deplora los episodios de arrestos, amenazas y persecución de opositores políticos, señaló la cancillería.

Brasil exhorta a las fuerzas políticas venezolanas a dialogar y buscar un entendimiento mutuo basado en el pleno respeto a los derechos humanos, añadió.

Mientras, Gustavo Petro, mandatario de Colombia, planteó ayer que si las elecciones de Venezuela no fueron libres, al realizarse bajo el bloqueo económico que se convierte en una extorsión explícita, es importante mantener la tesis del diálogo político más amplio posible en esa nación, el levantamiento integral del bloqueo y una nueva posibilidad de expresión libre del pueblo, escribió en su cuenta de X.

Ecuador, Panamá, Costa Rica, República Dominicana, Perú, Chile, y Uruguay, así como la Organización de Estados Americanos, Luis Almagro, rechazaron la investidura de Maduro.

En tanto, la Comisión Internacional de Derechos Humanos instó al gobierno venezolano a tomar medidas para proteger a Carlos José Correa Barros, activista social detenido el 7 de enero.