Celebración y paráfrasis
C
ada felicidad tiene su día, / cada instante interino su ternura. / Oculto ahí, el calendario dura / lo que persiste en ti la algarabía. / Lo demás es buscar el mediodía / o un lucero para la noche oscura. / ¡Oh, feliz y dichosa la ventura / que me encuentre sin otra luz y guía! / Caminemos entonces sigilosos / hacia el parco destello, hacia los gozos / con los que el año en brevedad se alía. / Para ti, para mí, yo sólo quiero / que la felicidad tenga su día, /y 2025 su lucero
.
Reproducimos arriba un Soneto de Año Nuevo que reclina, reposa un cuarteto en el hombro de San Juan de la Cruz
, según indica el poeta poblano Enrique Pimentel –autor entre otros títulos del libro Catacumbas– en su página de Facebook.
Luego, paráfrasis de fragmentos de un texto de Aldo Pellegrini (1903-1973) sobre Georg Trakl (1887-1914). Partimos de lo particular para llegar a lo general: Eso es en realidad la poesía: una especie de atmósfera; algo que no es exclusivo para el entendimiento, sino que, como el aire respirado, debe llegar a la totalidad del ser.
La ambigüedad propia de toda verdadera poesía, la ambigüedad esencial de lo poético, permite que la interpretación de un poema pueda ser múltiple sin dejar de ser justa.
El impulso a desalienarse en la imaginación constituye el fundamento de la poesía.
Al auténtico poeta lo atosiga un afán de verdad, un querer descubrir qué es lo real detrás de la vida enmascarada, es un disconforme y un rebelde. Está en desacuerdo con el mundo; pero antes de abandonar el mundo propone cambiarlo, y ésa es la intención final de la poesía.
Denuncia y rechazo del mundo falso, inauténtico que se nos ofrece, la poesía tiene como fin incitarnos a recuperar ese mundo ideal al que aspira el hombre. Toda poesía, en alguna medida secreta, se construye con la esperanza de volver a aquella edad llamada de Oro.
Las palabras adquieren imprevistas cualidades según su posición en el discurso, y de acuerdo con sus relaciones con las palabras vecinas. Pasa con ellas algo similar a lo que sucede en el fenómeno del contraste simultáneo de los colores: se producen intercambios de influjos entre las palabras, hecho que modifica apreciablemente sus caracteres lexicológicos.
En todo gran poeta constituye factor esencial el juego armónico de las significaciones.
Todo auténtico poema es un misterio cargado de significados, un misterio que se torna revelación.