Morena consolida su hegemonía
La Cuarta Transformación gobierna en 24 entidades // La Presidenta obtuvo 36 millones de votos
Lunes 30 de diciembre de 2024, p. 5
Las elecciones federales de junio pasado marcaron la actividad política de 2024, año que no sólo dejó el histórico triunfo de Claudia Sheinbaum Pardo como Presidenta de México, sino también la consolidación de Morena y sus aliados como el grupo político hegemónico en el país.
Con mayoría calificada en el Congreso de la Unión, construida a partir de una votación apabullante en los comicios de junio y negociaciones marcadas por la polémica y las acusaciones de traición, el partido guinda logró lo que no pudo un año antes: aprobar el llamado plan C del ex presidente Andrés Manuel López Obrador.
De esta manera se avalaron reformas constitucionales que echan abajo el entramado jurídico construido durante los gobiernos tecnócratas de los partidos Revolucionario Institucional (PRI) y Acción Nacional (PAN). De ellas, las más controvertidas son la modificación a un Poder Judicial enfrentado con el Ejecutivo, la eliminación de los órganos autónomos y la incorporación de la Guardia Nacional a la Secretaría de la Defensa Nacional.
En contrapartida, 2024 representó para la alianza opositora conformada por PAN, PRI y PRD la profundización de su caída en las preferencias electorales. El blanquiazul vio decrecer el numero de sus senadores y diputados federales, el tricolor pasó a ser parte de la chiquillada
y el PRD perdió el registro como partido político tras una decadencia de varios años en las preferencias.
Tras la derrota de su candidata presidencial, Xóchitl Gálvez, la coalición opositora se enfrió y ahora no sólo deberá enfrentar las consecuencias de la elección de junio, sino la pulverización de su voto con la creación de nuevos partidos.
En medio de los dos bloques políticos, Movimiento Ciudadano (MC) ganó terreno y obtuvo más votos que el PRI. La pregunta entre los analistas es si esta buena racha podrá continuar con la ausencia de su dirigente Dante Delgado, forzado a retirarse por una grave enfermedad.
Desde enero pasado, el clima político en el país se encontraba en frenesí. Giras de los aspirantes presidenciales por el país, eventos, entrevistas con la prensa y hasta guerra sucia, sobre todo en Internet, conformaron las adelantadas precampañas electorales en las que incurrieron todas las fuerzas políticas.
En marzo, con las campañas electorales en forma, se recrudeció la lucha por la Presidencia. Sin embargo, las encuestas marcaron desde el inicio una ventaja para la ex jefa de Gobierno capitalina, y un sube y baja en el caso de Gálvez, quien un día enfocaba su discurso en tratar de jalar adeptos panistas, y otro día lo hacía con los priístas y perredistas.
El emecista Jorge Álvarez Máynez, quien entró a la contienda presidencial de último momento después de que Samuel García se vio forzado a retomar la gubernatura de Nuevo León para evitar que MC perdiera el control político del estado, se enfocó en una campaña preponderantemente virtual, con jingles, memes y tiktoks que se viralizaron en la juventud, pero sin actos masivos de apoyo.
En este marco, los partidos de oposición presentaron ante el tribunal electoral 16 quejas en contra de López Obrador, a quien acusaron de violar las normas en la materia y de hacer campaña a favor de la candidata de Morena, desde sus conferencias de prensa matutinas.
Al menos 11 de los recursos fueron declarados procedentes y en diversas ocasiones el Instituto Nacional Electoral (INE) dictó medidas cautelares, entre ellas, el retiro de algunas mañaneras
de la web.
Tres meses después llegó el esperado domingo 2 de junio. Aunque la oposición advirtió de posibles actos de violencia, los comicios transcurrieron sin mayores incidentes.
Los cómputos distritales dieron 35 millones 924 mil 519 sufragios a Sheinbaum Pardo, lo que representó 59.7 por ciento de la votación; la abanderada de PAN, PRI y PRD se llevó 16 millones 502 mil 697 votos, que fueron 27.4 por ciento del total, y el emecista logró 6 millones 204 mil 710 votos, es decir, 10.3 por ciento.
El triunfo fue contundente para Morena no sólo en la contienda presidencial, también en los estados.
De las nueve entidades que renovaron gobierno, Morena se llevó siete, incluida la jefatura de Gobierno de la Ciudad de México, mientras el PAN ganó sólo en Guanajuato y MC retuvo Jalisco. Con ello, ahora la 4T gobierna 24 entidades, el PAN en cuatro, el PRI en dos y MC en dos. Esto, luego de que el tricolor se mantuvo por 70 años como el partido hegemónico del país y de que el blanquiazul ocupara la Presidencia por 12 años.
Por lo que hace a la Cámara de Diputados, Morena y sus partidos aliados se llevaron la mayoría calificada en medio de reproches de la oposición al INE por supuestamente otorgar a los primeros una sobrerrepresentación.
En el Senado, el escenario fue distinto. El bloque morenista se quedó a cuatro votos de lograr la mayoría calificada necesaria para aprobar las modificaciones constitucionales. Dado lo anterior, negoció la incorporación de dos perredistas y el voto del veracruzano Miguel Ángel Yunes Márquez, lo que derivó en su expulsión del blanquiazul junto con su padre, el ex gobernador Miguel Ángel Yunes Linares. Además logró que un emecista no se presentara al pleno. Con ello pudo aprobar la reforma al Poder Judicial que plantea la elección de jueces, magistrados y ministros por voto popular.
El primero de octubre marcó el cierre del sexenio de Andrés Manuel López Obrador, el primer político de izquierda en llegar a la Presidencia de la República, y el inicio de la gestión de Claudia Sheinbaum, la primera mujer en ocupar ese cargo en la historia del país.
En los meses siguientes, el dirigente del PRI, Alejandro Moreno, logró una reforma interna que le permitió relegirse, consolidar su poder en el partido y desplazar a quienes cuestionaron el proceso. Como consecuencia de ello, se agudizó la salida de militantes de esta fuerza política.
En el PAN, el periodo de Marko Cortés como dirigente terminó después de seis años en los que acumuló múltiples derrotas electorales. En su lugar llegó Jorge Romero, acusado por presuntamente orquestar el llamado cártel inmobiliario en la alcaldía Benito Juárez.
En Morena, el dirigente Mario Delgado se integró como secretario de Educación y su lugar fue ocupado por Luisa Alcalde, mientras en MC el dirigente Dante Delgado dejó su lugar para el ex candidato presidencial Álvarez Máynez.