Vicam, Son., La etnia yaqui eligió a la Universidad del Pueblo Yaqui (UPY) como la sede para resguardar sus antigüedades sagradas. Se trata de 24 piezas de rituales de la colección Maaso Koba (Cabeza de Venado), las cuales estuvieron durante más de 100 años bajo resguardo del Museo Etnográfico Nacional de la Cultura del Mundo, en Gotemburgo, Suecia, y que han regresado a su territorio como parte del Plan de Justicia para la nación indígena asentada en el sur de Sonora.

Entre éstas destaca el famoso Maaso Koba (Cabeza de Venado), pieza central en los rituales de la tribu, así como una colección de máscaras de pascolas, chapayecas y matachines, elementos fundamentales de las ceremonias y danzas tradicionales que constituyen el alma de su cosmovisión.

Crescencio Buitimea Valenzuela, rector de la UPY, expresó con orgullo el significado de esta recuperación cultural: Nos toca la suerte de tener el famoso Maaso Koba que se trajo de Suecia, acompañado por otros elementos que identifican nuestra cultura. Estas reliquias, con más de 100 años de antigüedad, son símbolos de resistencia y memoria que fueron rescatados del olvido.

La historia detrás de estas piezas es tan compleja como la lucha del pueblo yaqui por su tierra y supervivencia. Durante décadas, estos objetos sagrados permanecieron en el recinto sueco, luego de ser recolectadas por investigadores europeos en los años 30. En esos años, la tribu yaqui, tras ser desplazada violentamente de Sonora, se encontraba dispersa por varias regiones de México, en especial Tlaxcala, donde coincidió con expediciones extranjeras que llevaron consigo una parte invaluable de su herencia cultural.

Se dice que cuando los yaquis se sumaban a las guerras, se llevaban todos los elementos para preservar su cultura. Las piezas fueron llevadas por décadas a Europa, y con el plan de justicia para la etnia se recuperaron y regresaron a la nación indígena, añadió el rector de la UPY.

Integrantes de la tribu apuntan que el retorno de los objetos sagrados, como parte del Plan de Justicia para la Nación Yaqui, impulsado por el gobierno federal, es un triunfo no sólo para la etnia, sino para todos los que luchan por la defensa de sus raíces.

Esta gestión contó con la participación de las secretarías de Relaciones Exteriores y de Cultura del gobierno de México, por conducto del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), el Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (INPI) y las autoridades de los ocho pueblos yaquis, que autorizaron la repatriación de los objetos sagrados mediante la suscripción de una minuta de acuerdos el 7 de diciembre de 2020.

El director del Centro INAH Sonora, Zenón Tiburcio Robles, y el restaurador adscrito a esta dependencia, Rodolfo del Castillo López, acudieron a la convocatoria emitida por el INPI, para verificar el estado de conservación de las piezas que, desde noviembre de 2022, se encontraban bajo el resguardo del segundo, en la Ciudad de México, luego de su repatriación desde Gotemburgo, Suecia, en junio de 2022.

Para la etnia yaqui la devolución de los objetos representa la recuperación de un legado espiritual, un vínculo tangible con la cosmovisión yaqui, donde cada objeto tiene vida, un significado profundo que trasciende el tiempo y el espacio. Las danzas del venado, los rituales de los pascolas y las ceremonias de los matachines no son meras expresiones folclóricas; son, en esencia, un diálogo con lo divino, una manifestación de la relación entre los yaquis, la naturaleza y sus ancestros.

No había otro espacio más idóneo que la UPY para albergar estas reliquias, afirmó Buitimea Valenzuela. Aquí compartimos nuestra historia, todo lo que tiene que ver con nuestra tradición, nuestro arte y cultura, en el mejor entorno posible: una institución creada desde y para nuestra gente.

La Universidad del Pueblo Yaqui no es sólo un centro de enseñanza superior, sino un espacio donde se nutre y fortalece la identidad de la nación yaqui. Con más de 450 estudiantes provenientes de los ocho pueblos originarios del sur de Sonora, las carreras que ofrece –educación, medicina y salud comunitaria, derecho e ingeniería en procesos de producción sostenible– están diseñadas bajo una cosmovisión que privilegia el conocimiento ancestral y la lengua yaqui.

La exposición de las piezas sagradas consolida aún más los esfuerzos de preservación cultural que impulsa la universidad.

Este sábado, la doctora Claudia Sheinbaum Pardo realizará su primera visita a Sonora como presidenta de México, inaugurará de manera oficial la UPY y refrendará su compromiso con los pueblos originarios, así como la continuidad del Plan de Justicia para la etnia asentada en el sur de Sonora.