Jueves 28 de noviembre de 2024, p. 7
Madrid. Distintas regiones de la Tierra están sufriendo repetidas olas de calor que son tan extremas que están muy por encima de lo que cualquier modelo de calentamiento global puede predecir o explicar.
Un nuevo estudio publicado en la revista Proceedings of the National Academy of Sciences proporciona el primer mapa mundial de dichas regiones, que aparecen en todos los continentes excepto la Antártida como manchas gigantes e irritadas en la piel. En los pasados años, estas olas de calor han matado a decenas de miles de personas, han arruinado cultivos y bosques y han provocado incendios forestales devastadores.
Los grandes e inesperados márgenes por los que los extremos a escala regional recientes han batido récords anteriores han planteado preguntas sobre el grado en que los modelos climáticos pueden proporcionar estimaciones adecuadas de las relaciones entre los cambios de temperatura media global y los riesgos climáticos regionales
, dice el estudio.
Se trata de tendencias extremas que son el resultado de interacciones físicas que quizá no comprendamos del todo
, mencionó el autor principal, Kai Kornhuber, científico adjunto del Observatorio Terrestre Lamont-Doherty de la Escuela del Clima de la Universidad de Columbia. Estas regiones se convierten en invernaderos temporales
.
El estudio analiza las olas de calor de los pasados 65 años e identifica áreas en las que las altas temperaturas extremas se están acelerando considerablemente más rápido que las más moderadas. Esto a menudo da por resultado máximas que se han superado repetidamente en cantidades descomunales, a veces asombrosas.
Por ejemplo, una ola de nueve días que azotó el noroeste del Pacífico de Estados Unidos y el suroeste de Canadá en junio de 2021 rompió récords diarios en algunos lugares en 30 grados centígrados. Entre ellas, la más alta jamás registrada en Canadá, 49.6, en Lytton, Columbia Británica. La ciudad ardió hasta los cimientos al día siguiente en un incendio forestal provocado en gran parte por la desecación de la vegetación debido al calor extraordinario. En los estados de Oregón y Washington, cientos de personas murieron por insolación y otros problemas de salud.
Estas olas de calor extremas han estado azotando predominantemente en los pasados cinco años, aunque algunas ocurrieron a principios de 2000 o antes. Las regiones más afectadas incluyen a China central, Japón, Corea, la Península Arábiga, el este de Australia y partes dispersas de África.
Otras incluyen los territorios del noroeste de Canadá y sus islas del Alto Ártico, el norte de Groenlandia, el extremo sur de Sudamérica y parches dispersos de Siberia. En el mapa aparecen áreas de Texas y Nuevo México, aunque no están en el límite más extremo.