En una decisión que deberán tomar a marchas forzadas, los consejeros evalúan a la persona que podría ocupar la titularidad de la secretaría Ejecutiva del Instituto Nacional Electoral, luego de un año y siete meses con encargados de despacho en ese mando administrativo y jurídico.

El fin de semana y el lunes, entrevistaron a Claudia Arlett Espino, nueva propuesta de la consejera Guadalupe Taddei; hasta anoche no estaban asegurados los ocho votos necesarios para concretar el nombramiento en el Consejo General.

Como se ha difundido, la actual encargada, Claudia Suárez, presentó su renuncia por motivos personales y dejará el cargo este sábado 30 de noviembre, de ahí la urgencia de nombrar a la responsable y evitar que este segundo mando del INE, sólo por debajo del Consejo General, quede acéfalo.

El tema fue tratado ayer en la mesa semanal de consejeros pero, ante la falta de determinaciones, continuarán con el análisis al término de la sesión de Consejo General cuyo inicio está programado para las 10 de la mañana, en la que verán preparativos de las elecciones locales del año entrante en Veracruz y Durango.

El bloque afín a Taddei suele ser minoría de cinco, así que habría una persona adicional a este grupo que daría el beneficio de la duda a Espino, ex consejera presidenta del Instituto Electoral de Chihuahua, señalada de presuntas irregularidades administrativas en los 10 meses que ocupó el máximo cargo en ese organismo local.