Tapachula, Chis., Al menos dos caravanas de migrantes avanzan por las costas de Chiapas y Oaxaca con el objetivo de llegar al centro y norte de México. Los contingentes tienen prisa de cruzar a Estados Unidos, antes del regreso de Donald Trump a la presidencia.

Un grupo de extranjeros salió de Tapachula el pasado 5 de noviembre, justo el día de la elección estadunidense, y se hallaba este martes en el municipio oaxaqueño de Santo Domingo Tehuantepec.

De los 2 mil 500 que partieron originalmente ya sólo quedaban alrededor de 700, dijo una mujer venezolana. Sostuvo que el Instituto Nacional de Migración (INM) ofreció trasladarlos a estados como Guerrero y Michoacán, y muchas accedieron a irse.

La otra caravana, que también salió de Tapachula, pero el día 20, autodenominada El Último Éxodo del Año, se encontraba ayer en Pijijiapan, Chiapas. Brayan Velázquez, uno de los coordinadores del grupo, reiteró su llamado de ayuda a organismos de derechos humanos y de la sociedad civil.

El joven de origen guatemalteco aseguró que muchas mujeres y niños ya van muy lesionados de pies y piernas, debido a su caminatas hasta de 20 kilómetros diarios, por lo que urge ayuda humanitaria.

Asimismo, demandó a las autoridades mantener las escoltas de la Guardia Nacional y de policías locales que los protegen en el recorrido, porque temen el acecho del crimen organizado.

En los últimos dos meses han salido de Chiapas al menos seis caravanas. Tres partieron en octubre y tres en noviembre. Los extranjeros argumentan que en la frontera sur no hay trabajo, los alquileres están caros y los papeles de regularización en México tardan meses. Además, muchos buscan una cita en la plataforma electrónica CBP One para obtener asilo en Estados Unidos.