Desvía atención de violaciones a los derechos humanos
Jueves 21 de noviembre de 2024, p. a12
Dubái. La ONG internacional Human Rights Watch (HRW) valoró que los vínculos establecidos por la NBA con Emiratos Árabes Unidos podrían servir al sportwashing (lavado de imagen a través del deporte).
La liga estadunidense de basquetbol organiza partidos de pretemporada en Abu Dabi desde 2022, y la NBA Cup anual, que debutó la semana pasada, ahora cuenta con el patrocinio de la compañía Emirates de Dubái.
Esos partidos forman parte de los esfuerzos desplegados por el gobierno de Emiratos Árabes Unidos para desviar la atención de las numerosas violaciones de derechos humanos cometidas en el país y en el extranjero
, escribe HRW en un comunicado.
Según la ONG con sede en Nueva York, estas violaciones incluyen un supuesto apoyo a los paramilitares de las Fuerzas de Apoyo Rápido (FSR) en Sudán, donde una guerra ha provocado una de las peores crisis humanitarias del mundo.
Las autoridades de Emiratos no reaccionaron de forma inmediata, pero a principios de semana negaron de nuevo en un comunicado cualquier tipo de implicación en la guerra de Sudán.
Emiratos Árabes Unidos rechaza firmemente cualquier acusación de haber suministrado armas o equipamiento militar a una u a la otra parte beligerantes
, destacaron en el documento.
HRW también habló de la política de tolerancia cero
hacia cualquier tipo de disidencia en Emiratos, y a un sistema de apadrinamiento abusivo
para los trabajadores migrantes.
Asimismo, la organización menciona un juicio en masa en el que 43 emiratíes fueron condenados a cadena perpetua por vínculos con el terrorismo
en julio, un proceso criticado por los expertos de Naciones Unidas y por defensores de derechos humanos.
La NBA debería saber que los Emiratos acogen actos deportivos, culturales y de entretenimiento de alto nivel para promover una imagen pública de apertura y de tolerancia, en contradicción con las violaciones sistemáticas y endémicas de los derechos humanos
, añade HRW.
Emiratos Árabes Unidos, rico en petróleo, ha invertido en el deporte de alto nivel como Fórmula 1, golf y futbol. Abu Dabi es propietario del poderoso club inglés Manchester City.
El sportwashing es un término que se puso de moda en 2022, cuando por medio de la Copa Mundial, Qatar pretendió enseñar al mundo su lavado de cara, mostrándose como un país respetuoso con los derechos, ya sean de las mujeres o del colectivo LGBT+.
Actualmente en Arabia juegan grandes estrellas del futbol, como Cristiano Ronaldo y Neymar; además, recientemente se creó un nuevo circuito, el LIV, capaz de competir con el PGA. El último intento de los sauditas es a través del tenis, con el nacimiento del torneo de exhibición Six Kings Slam.
El país es además candidato para recibir la Copa Mundial de la FIFA 2034. En su campaña han incluido planes para construir 11 nuevos estadios, uno de ellos a 350 metros de altura.