La presidenta Claudia Sheinbaum hizo una distinción entre la inseguridad que se enfrenta hoy en el país y la violencia y represión de Estado que se dio en regímenes anteriores.

En la mañanera de ayer, a propósito de que nuevamente salió a la luz que su madre –la científica Annie Pardo Cemo– fue víctima de espionaje por su activismo en movimientos sociales, como el estudiantil de 1968, la mandataria federal dejó claro que en el pasado había represión desde el Estado, lo que no se da en su administración.

“Ahora se habla de ‘autoritarismo’, de ‘antidemocracia'; participar en aquellas épocas no era fácil, o sea, estaba prohibido, había presos políticos por participar. Los estudiantes del 68 estuvieron presos y, como bien dijo aquí Pablo Gómez (en días pasados), nunca se les retiró su sentencia; después, hubo una amnistía, pero esos sí eran regímenes represivos.

Eso no existe ahora, por supuesto, hay problemas de inseguridad en el país que estamos atendiendo, pero no hay represión por parte del Estado mexicano, es otra cosa, enfatizó.

A pregunta sobre el hecho de que la Dirección Federal de Seguridad espió a su madre durante casi una década, la titular del Ejecutivo comentó que en el Archivo General de la Nación (AGN) había información de seguimiento a su madre y a su padre (Carlos Sheinbaum Yoselevitz) e inclusive de ella, cuando tenía seis años, por el activismo de Pardo Cemo, que incluso la llevó cuando era niña a visitar a los presos políticos de Lecumberri.

Recordó que, en esa época, su madre era profesora y estudiante de posgrado en el Instituto Politécnico Nacional, pero la expulsaron por su adherencia al movimiento estudiantil, por lo que se fue a la Universidad Nacional Autónoma de México, donde el entonces rector Javier Barros Sierra tuvo un papel distinto a las autoridades politécnicas.

Con el tiempo, Pardo Cemo se hizo académica de la Facultad de Ciencias y hoy es investigadora emérita y una de las científicas más reconocidas en su campo de estudios.

“Le costó trabajo por dos cosas: por ser mujer y también por participar en movimientos sociales, porque siempre fue muy participativa en la universidad (…) Para mí es un orgullo ser hija de Annie Pardo”, subrayó la mandataria.