Sábado 9 de noviembre de 2024, p. 25
Por más de dos horas, vecinos del pueblo de Santa Úrsula Xitla, alcaldía Tlalpan, bloquearon ambos sentidos de la avenida Insurgentes Sur a la altura del cruce con Camino a Fuentes Brotantes, para exigir la clausura de la obra que se realiza en el 134 de dicha vialidad por presuntas infracciones en materia ambiental.
Mientras se efectuaba la protesta –que empezó a las 14 horas–, personal de la Procuraduría Ambiental y del Ordenamiento Territorial (PAOT) y de la Secretaría del Medio Ambiente (Sedema) inspeccionaban el interior del predio a fin de verificar el estado del arbolado protegido en la manifestación de impacto ambiental autorizado a la constructora.
Paulina Garibay Pérez, autoridad tradicional del pueblo, explicó que en el predio donde se planea construir un conjunto habitacional de 52 viviendas en más de 11 mil 400 metros cuadrados habrían sido talados más árboles de los permitidos.
La empresa refiere que de 154 ejemplares inventariados desde 2020, se autorizó el derribo de 47, el trasplante de 23 y siete podas.
A decir de Garibay y otros vecinos, la tala se inició durante el anterior gobierno de Alfa González en la alcaldía antes de que la empresa obtuviera la manifestación de impacto ambiental, por lo que el predio está prácticamente llano.
El bloqueo se levantó a las 16:20 horas una vez que se acordó la instalación de una mesa de trabajo el próximo miércoles en la alcaldía con funcionarios del gobierno central y el órgano político-administrativo en la que la Sedema llevará la resolución sobre la inspección del arbolado, y en caso de que se confirme la tala de más ejemplares, de los que fueron autorizados, se procederá a la clausura de la obra.
Los manifestantes conversaron también vía telefónica con la alcaldesa, Gabriela Osorio Hernández, quien confirmó que estará presente en la reunión y manifestó su disposición a revisar el tema.
La Jornada intentó consultar a la empresa sobre el reclamo de los vecinos en el número telefónico publicado en la página web de Graus (García, Rivas, Arquitectura, Urbanismo, Sociedad), que promociona el proyecto, así como al número proporcionado por Jorge García Sosa, quien ostenta la representación legal de Sergio Fuentes Corella, propietario del predio, pero en ningún caso ingresó la llamada.