De Elon Musk y Bloomberg, las mayores aportaciones
Desde 2010 la Suprema Corte anuló los límites a las donaciones de campaña // Se legalizó el soborno
, señaló años después el ex presidente Jimmy Carter
Miércoles 6 de noviembre de 2024, p. 21
Nueva York y Washington. Uno de los factores claves en toda elección estadunidense es el voto de los dólares, y los ricos que los tienen. Ambos partidos recaudan enormes cantidades de dinero privado para comprar publicidad, contratar personal de apoyo y pagar casi todos los gastos de cada candidato y del partido en esta contienda. Para los grandes donantes es una inversión; esperan que sus dólares compren por lo menos acceso a los políticos una vez electos, y así puedan influir en sus decisiones.
Según cálculos de Open Secrets, proyecto independiente de monitoreo sobre dinero en comicios, esta elección presidencial ha costado 5.5 mil millones de dólares hasta la fecha; la legislativa federal asciende a 10 mil millones, lo que hace un total para la elección nacional de 15.9 mil millones de dólares.
Por ahora es la segunda elección más cara en la historia del país, sólo superada por la nacional de 2020, que costó 18.3 mil millones en términos reales, aunque se pronostica que ésta, al final, será la más cara de todas.
La participación explícita de multimillonarios, unos muy públicos, otros más discretos, no deja de asombrar, con el hombre más rico del planeta, Elon Musk, contribuyendo con más de 130 millones en la campaña del multimillonario Trump, mientras Michael Bloomberg contribuyó con 50 millones a la de Harris; en total, unas 150 familias multimillonarias han invertido 1.9 mil millones en apoyo a candidatos presidenciales y legislativos, con la gran mayoría (72 por ciento) fluyendo a los republicanos, según un nuevo informe dado a conocer por Americans for Tax Fairness. A la fecha, en todas las elecciones, desde las federales hasta las locales, se han gastado 10.5 mil millones en publicidad de campaña, reportó National Public Radio.
El dinero de los ricos y de grandes empresas fluye de manera directa o indirecta a las campañas presidenciales y legislativas, ya que de acuerdo con un fallo de la Suprema Corte en 2010, se anularon los límites, ya que los jueces conservadores decidieron que el dinero de éstos al proceso electoral está protegido porque es una forma de libertad de expresión
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El ex presidente Jimmy Carter, fundador del Centro Carter, que se dedica a la transparencia y monitoreo de elecciones en el mundo, caracterizó el fallo como algo que permitió el soborno legalizado
en la política.
En entrevista con la BBC en 2016, Carter explicó: con los ricos financiando las campañas, cuando los candidatos llegan a sus puestos hacen lo que los ricos quieren, y eso es dejar que los ricos se vuelvan más y más ricos y dejar fuera a la clase media
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