Este viernes Petróleos Mexicanos (Pemex) y la Comisión Federal de Electricidad (CFE) recuperan su carácter de empresas públicas, luego de que se publicó en el Diario Oficial de la Federación el decreto por el cual se modificaron los artículos 25, 27 y 28 constitucionales.

Los cambios en materia energética, con los que se busca garantizar el acceso a la energía a precios asequibles y que fueron aprobados en semanas recientes por el Congreso de la Unión entraron en vigor 11 años después de la aprobación de la reforma energética impulsada en la administración de Enrique Peña Nieto, que abrió al capital privado las actividades reservadas al Estado.

El decreto, que fue firmado el 30 de octubre por la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, reformó el artículo 25, el cual estipula que el gobierno federal mantiene la propiedad y el control sobre los organismos y empresas públicas del Estado.

El artículo 27 señala que la explotación de los recursos energéticos se realizarán sólo mediante concesiones aprobadas por el Ejecutivo federal, pero también deja en claro que el incumplimiento de las normas relacionadas con la explotación de los minerales y substancias será motivo de cancelación de las concesiones respectivas.

Los cambios también reiteran que el Estado es el único responsable de la planeación y el control del sistema eléctrico nacional, así como de la transmisión y distribución, por lo que no se otorgarán concesiones para esas dos últimas actividades.

“Las leyes determinarán la forma en que los particulares podrán participar en las demás actividades de la industria eléctrica, que en ningún caso tendrán prevalencia sobre la empresa pública del Estado. Lo anterior significa que el Estado será el responsable de generar 54 por ciento de la energía, y del restante se ocuparán los privados.

En el artículo 28 quedó establecido que el Estado tiene exclusividad en áreas estratégicas como minerales radiactivos, litio y generación de energía nuclear, y en la planeación y el control del sistema eléctrico nacional.