Ningún piloto tiene el recibimiento que dan acá, afirma
Jueves 24 de octubre de 2024, p. a11
Hace un año Sergio Pérez despertó con la incómoda sensación de un mal sueño. Como si hubiera tenido una pesadilla en la que se estrellaba con su Red Bull cuando apenas empezaba la carrera en el Gran Premio de la Ciudad de México en 2023. Ni siquiera había corrido un kilómetro cuando el monoplaza colisionó con otro vehículo en la primera curva del autódromo Hermanos Rodríguez.
Eso no había sido un mal sueño, sino una pesadilla de la realidad. Así terminó su participación más esperada en el año en la pista de su propio país. En sólo 18 segundos y 800 metros de competencia.
Ese domingo por la tarde, Checo lloró un poco; mutaba de la tristeza al enfado. No comprendía por qué precisamente en esa carrera había sufrido el desenlace menos esperado. Ofreció algunas entrevistas y expresó su frustración, pero sobre todo su enojo.
Después se fue al hotel de concentración y durmió unas horas. Y entonces despertó a esa reali-dad áspera y caprichosa, con el recuerdo del choque contra el monegasco Charles Leclerc a bordo de un Ferrari.
En mi cabeza se quedó esa imagen: llego en primer lugar a la curva, estaba Max Verstappen, Leclerc. Ese accidente pasó por muchos factores, no sólo por mí
, contó Checo durante una conferencia en la Plaza Carso, en Polanco.
Es una curva difícil y todos nos tiramos adelante y al final no se dio. Pero tenía que intentarlo, porque si me salía hubiera quedado en una posición estupenda
.
A la distancia
Checo recuerda con la tranquilidad que da la distancia. Parece como si contara una anécdota que le ocurrió hace tanto, como si fuera una memoria de infancia y no un accidente que lo dejó fuera hace apenas un año.
Así es la Fórmula 1, aquí eres tan bueno como fue tu última carrera. Si tienes un fin de semana malo, siempre puedes levantarte en el siguiente Gran Premio
, acotó.
Después vino Sao Paulo donde Checo ofreció una carrera espectacular y terminó con la cuarta posición, a sólo un parpadeo de alcanzar podio. Y semanas más tarde culminó subcampeón de la temporada, que conquistó su indomable compañero Verstappen.
Este año el piloto mexicano no llega en esa posición de privilegio, pues esta temporada ha sido difícil y se encuentra lejos del subcampeonato de 2023. Pérez está ubicado en el octavo lugar a cinco carreras de culminar la campaña.
Esta es una temporada difícil
, aceptó Pérez; tuve el mejor comienzo de mi carrera con cuatro podios en las primeras cinco carreras. Cuando todo parecía ir mejor, empezaron con las adaptaciones al auto y empezó a complicarse
.
La temporada 2024 parecía prometedora para el mexicano. Dos segundos lugares consecutivos apenas en el inicio del serial; luego en la tercera y cuarta parada del campeonato obtuvo otro segundo puesto y un tercero. Después empezó el declive y sumó incluso dos retiros consecutivos, en Mónaco y Canadá.
Todo se complicó con el auto; no le tenía confianza y cada fin de semana había que enfrentar un problema diferente
, relató.
Las deficiencias ahí estaban y las podíamos ver, pero no es fácil solucionarlas. Lo único que quedaba era tratar de hacer lo mejor que podía cada fin de semana.
Y mientras Checo sufría en el serial y Red Bull ya no era el equipo al que ni siquiera le veían el polvo, McLaren y Ferrari se metieron a la competencia con ferocidad.
En estas últimas carreras han estado bastante competitivos; aún quedan cinco circuitos en la temporada y vamos a tratar de volver a ser como fuimos, siempre hay oportunidad de levantarse.
Esta campaña desató rumo-res de que el mexicano estaba cerca de dejar Red Bull, pero hace unos meses firmó por un par de años más y estará en la escudería hasta 2026.
Me río de los rumores. La verdad es que soy muy afortunado con la carrera que tengo. En el equipo valoran mucho mi trabajo, por eso sigo aquí y firmé por dos años más
, agregó y dejó en claro que no se siente minimizado de compartir equipo con el líder absoluto y campeón defensor Verstappen.
Aún con el sabor de aquella pesadilla de 2023 en el autódromo Hermanos Rodríguez y que esta temporada ha sido más complicada de lo que parecía, Checo con-fía que el fin de semana podrá conjurar sus temores.
No se siente presión de correr en mi país, sino mucha motivación. Estar con tu gente, ningún piloto tiene el recibimiento que a mí me dan en México, estar con los tuyos a quienes visitas una sola vez al año y eso la hace la fecha más especial del campeonato
, subrayó optimista.
Y finalizó con la objetividad necesaria en un deporte donde la pericia, el clima, la tecnología y un poco de azar también intervienen en la pista. Este circuito es totalmente diferente a todos. La altura hace que los coches funcionen diferente, así es este deporte y todo puede pasar aquí
.