La dirigencia de Morena anunció a la mayoría de sus trabajadores que dejarán de laborar y no se les renovará su contrato. Además, el Comité Ejecutivo Nacional (CEN) dejó las instalaciones que utilizaron por tres años en la avenida Ejército Nacional, alcaldía Miguel Hidalgo, y se mudó a oficinas del partido en la calle Liverpool, en la colonia Juárez.

Tras la llegada de Luisa Alcalde a la dirigencia, decenas de empleados de diversas áreas, desde choferes, personal administrativo y de informática, han dejado de trabajar. Empleados del partido que solicitaron el anonimato relataron que desde el periodo de Mario Delgado como líder tuvieron contratos por honorarios que renovaban cada mes, y con la nueva administración partidaria, que comenzó el 1º de octubre, han dejado de laborar por secciones.

Otros trabajadores aseguraron que aún no son notificados sobre si contarán con algún tipo de liquidación y se mantienen en negociaciones a la espera de un finiquito.

En redes sociales también se han difundido denuncias por despidos en esta fuerza política y en la Cámara de Diputados. Los recortes se presentan a la par de las giras que han emprendido integrantes de la nueva dirigencia morenista por diversas entidades del país para realizar asambleas informativas.

En tanto, desde el inicio del actual CEN del partido guinda comenzó la mudanza hacia el edificio localizado en calle Liverpool número 3. Se trata de un edificio que ya era propiedad del partido y en el cual operaban algunas de sus áreas. El inmueble, valuado en 48 millones 720 pesos, fue parte de las adquisiciones que realizó Yeidckol Polevensky cuando era secretaria general de Morena en funciones de presidenta del CEN.

Con ello, dejaron el edificio de la colonia Granada que fue rentado durante la gestión de Mario Delgado, después de que manifestantes tomaron la casona de la calle Chihuahua y Monterrey, en la colonia Roma.