Viernes 18 de octubre de 2024, p. 29
En la segunda jornada del programa Gobierno Casa por Casa, ahora en la colonia Agrícola Pantitlán, en Iztacalco, la titular del Ejecutivo local, Clara Brugada, se comprometió a no permitir más desarrollos inmobiliarios en la alcaldía, pues ya se construyeron muchos edificios que presionan esta zona en materia de agua y espacios públicos.
En esta ocasión, junto con la alcaldesa, Lourdes Paz, y los integrantes de su gabinete, con sus respectivos equipos de trabajo, recorrieron 44 manzanas, donde se recibieron casi 2 mil solicitudes vecinales, entre ellas intervenciones en vía pública, poda de árboles y alumbrado, bacheo, vigilancia, desazolve y sustitución de coladeras, entre otras.
Tras un acto protocolario, la mandataria recorrió casas y negocios en calle 4, donde le pidieron mejorar el transporte público y mayor seguridad, en particular en calle 7, que colinda con el estado de México, por lo que instruyó al secretario de Planeación y Ordenamiento Territorial, Alejandro Encinas, atender esta problemática, la cual, añadió, se debe resolver de manera conjunta con la entidad vecina.
Ante un grupo de colonos que se detuvo a saludarla, Brugada señaló que a pesar de que la Agrícola Pantitlán es una de las colonias con mayor población, no hay espacios públicos, por lo que se harán las gestiones para contar con un predio en el que se pretendía construir un desarrollo inmobiliario para convertirlo en una Utopía con todos los servicios.
Más tarde, vecinos de la colonia Granjas México bloquearon durante casi seis horas ambos sentidos de la avenida Río Churubusco y la intersección de Eje 3 Oriente Añil, para manifestar su rechazo a un desarrollo inmobiliario en un predio de más de 10 mil metros cuadrados.
La construcción de Río Churubusco 213 que hace años fue un centro de distribución de la empresa José Cuervo, comenzó a ser demolida la semana pasada para edificar un edificio de 17 niveles para 904 departamentos, lo que ha generado preocupación de 14 familias colindantes por el riesgo de afectaciones a sus viviendas.
Los manifestantes señalaron que además de problemas con el abastecimiento de agua en la zona, que se incrementaría con el proyecto, la tormenta del pasado 16 de septiembre evidenció deficiencias en la capacidad del drenaje al inundar varias viviendas de la calle Avena.