El Cuarteto Orishas, de guitarra, apunta a una experiencia emocionante, diversa y llena de sorpresas para el oído, a la manera de La rueda de la fortuna, título del concierto que ofreció en el Centro Nacional de las Artes. El programa comprendió obras de música antigua, barroca, de vanguardia e incluso inspiradas en las tradiciones populares.

Fundado en 2007, el Cuarteto Orishas buscó en un principio inmiscuirse en la música latinoamericana para cuartetos de guitarra; sin embargo, con el paso del tiempo se ha abierto a abarcar música de muchas épocas y partes del mundo, señala Diego Emerith Cruz Sánchez, miembro del grupo junto con Mario Ernesto Vladimir Ibarra Velázquez, Jesús Guarneros Soto y Carlos Daniel Aguilar Benítez.

Integrado por cinco obras, el concierto iniciará con la obertura de El barbero de Sevilla, de Gioachino Rossini, obra tremendamente conocida. El cuarteto siempre procura que el público se sienta lo más en confianza posible, con la finalidad de eliminar cualquier idea del tipo “una sala de concierto es para algo intelectual, para una élite.

“Casi siempre en nuestros programas incluimos algo muy conocido al oído popular. Aunque es música académica, El barbero de Sevilla es un tema que se ha empleado en muchos lugares, incluidas caricaturas, comedias y películas. La mayoría de las personas tienen ese tema, ciertamente picaresco, muy presente en el oído”, explica Cruz Sánchez a La Jornada.

La segunda pieza es el Concierto de Brandenburgo núm. 3, de Johann Sebastian Bach, obra icónica de la música barroca, en una transcripción de Guarneros Soto, quien la adaptó para cuatro guitarras; originalmente es para un ensamble de cuerdas. Aunque sea una pieza fácilmente reconocible, lo hemos traído a un lenguaje diferente.

Tiene, además, una particularidad: En el segundo movimiento Bach sólo escribió dos acordes. Eso nos sugirió, como en aquella época era común la improvisación, que deberíamos improvisar en vez de sólo tocar esos dos acordes. Jesús, pues, hizo una cita de música de Silvestre Revueltas, e incrustó unos temas.

La tercera pieza, Don Esteban (2024), del compositor veracruzano Carlos Matus (1983), es un homenaje a Esteban Utrera, creador de una dinastía de los Utrera en el son jarocho. En este estreno mundial, escrito para Cuarteto Orishas, Matus arma y desarma al son jarocho dentro del lenguaje de la música contemporánea. Se aprecian algunos elementos de este lenguaje musical, aunque confusos y difusos, hasta que en algún momento de la obra se arranca tal cual con un son jarocho.

El laberinto de los sueños, de Cutberto Córdoba (1964), también es estreno mundial y de un veracruzano. Escrito en tres movimientos (El rumor del tiempo, El rincón de los secretos e Insomnio), aquí su autor, que es guitarrista, “utiliza la técnica tal cual de este instrumento gracias a su conocimiento tan extenso del mismo para hacer una obra que reflexiona acerca de los sueños.

Cutberto nos contaba que el mundo de los sueños es algo que lo ha marcado. Es de las personas que anotan sus sueños, los comparan y tratan de buscar un significado. Es una obra enigmática e idiomática.

El concierto cerrará con News from nowhere (1992), de Phillip Houghton (1954-2017), escrita en un lenguaje más experimental. Hasta este momento todo el programa se toca dentro de “las cuerdas, la guitarra, lo más tradicional que se ha hecho; sin embargo, Houghton emplea otros elementos. Utilizamos sonidos para emular jaguares, por ejemplo, que se hacen con instrumentos externos a la guitarra como percusiones, golpes al instrumento, unas monedas que pasan por el diapasón para simular sonidos de rocas. Suenan por allí hasta delfines, anota Cruz Sánchez.

La búsqueda del Cuarteto Orishastiene que ver esencialmente con la exploración de la explotación de la técnica de la guitarra. Tanto es así que una de las guitarras que utilizamos tiene ocho cuerdas en vez de seis, y así contar con una gama de notas mucho más amplia. Hemos adquirido instrumentos del mismo constructor con la idea de lograr un sonido uniforme, de tal manera que el público pueda sentir que es una sola guitarra tocando muchísimas cosas al mismo tiempo.

Les caracteriza el esquema de tocar música muy conocida por el oído, seguida de obra nueva acompaña de un comentario tipo didáctico.

El Cuarteto Orishas cuenta con dos grabaciones, Caleidoscopio ame-ricano y Gitana, disponibles en todas las plataformas de streaming. Su nuevo disco saldrá a principios de 2025.

Son beneficiarios del Sistema de Apoyos a la Creación y Proyectos Culturales, por lo cual tienen giras y conciertos programados en todo el país en los próximos dos años.

Ofrecieron el concierto La rueda de la fortuna el viernes pasado y lo repetirán el 14 de noviembre, a las 19 horas, en el Auditorio Blas Galindo, del Centro Nacional de las Artes.