En México, unas 400 mil personas se dedican a recolectar residuos en alrededor de 2 mil 200 vertederos para sobrevivir, y a pesar de que no son reconocidos como trabajadores carecen de derechos, enfrentan abusos de las autoridades y discriminación, y son una de las principales fuerzas de contención al cambio climático, destacó Luis Fernández Ruiz, director de la organización Práctica: Laboratorio para la Democracia.

A diario, decenas de manos separan plástico, metales, textiles, papel y cartón, y cada persona recoge, revisa o procesa cerca de 300 kilos de basura en la pepena, señaló Mariana González, quien se dedica a esta labor desde hace 18 años, quien junto con dos personas más emprendieron el Movimiento Nacional de Recicladores.

Su intención es mejorar las condiciones y los derechos laborales de los trabajadores, así como fortalecer su capacidad de negociación frente a la industria, compradores y sus empleadores directos, que son los municipios, afirmaron en entrevista en un acto celebrado en el Huerto Roma.

El sustento

Mariana nació en Dolores Hidalgo, Guanajuato, y junto con su esposo trabaja en el tiradero municipal. Esta actividad, dijo, se ha convertido en el sustento para sacar adelante a sus dos hijas, estudiantes de secundaria y preparatoria.

Comentó que los recicladores trabajan sin horario específico, depende de la necesidad de cada quien, y aseguró que en una buena jornada gana 250 pesos por día.

Sin embargo, los compradores ya no les pagan bien el material que recolectan, le ponen el precio que quieren; incluso, no los reciben por temporada, como el cartón en tiempos de lluvia, y hay que lidiar con todo esto y buscar el mejor cliente.

Advirtió que en la recolección de residuos con valor económico enfrentan riesgos, como cortarse con vidrios, pincharse con jeringas contaminadas o exponerse a animales en estado de descomposición, que pueden agarrar sin protección.

De ahí la importancia de impulsar incluso leyes que les garanticen derechos básicos como el acceso a la seguridad social, a guarderías, ahorro para el retiro y para la vivienda, enfatizó Fernández Ruiz, quien a través de la organización proporciona apoyo técnico al proyecto.

Además de Mariana, Lidia Godínez y Abel Balderas decidieron arrancar el Movimiento Nacional de Recicladores en Puebla, Oaxaca, Veracruz, Durango, Querétaro, Guanajuato y Chihuahua, donde se visitaron 16 vertederos. Actualmente 450 personas pertenecen al colectivo y confían en expandirse para abarcar las 32 entidades, ya que son un sector importante para que las ciudades no estén llenas de basura.