Guadalajara, Jal., El Congreso de Jalisco aprobó la despenalización del aborto en el estado, como lo mandató en abril pasado el segundo tribunal colegiado en materia penal del tercer circuito, tras declarar inconstitucionales los artículos que en la entidad prohibían de forma absoluta la suspensión del embarazo.

Las votaciones se realizaron por cédula, es decir, de manera anónima, y no nominal, como es común cuando cada legislador se hace responsable del sentido del sufragio, lo que causó la molestia no sólo de algunos que pedían votación abierta o de los grupos conservadores que se manifestaron durante todo el día afuera del recinto y querían conocer cómo votó cada diputado.

En primera instancia hubo empate de 18 sufragios a favor y 18 en contra más una abstención, lo que obligó a una segunda ronda pasadas las 10 de la noche, en la cual hubo 20 votos a favor y 16 en contra más una abstención.

Con esta decisión se modificó el Código Penal del estado y quedaron establecidos como excluyentes de responsabilidad penal cuando la interrupción del embarazo sea resultado de una violación, abuso sexual infantil o inseminación artificial no consentida.

Entre otras, también quedó establecido que no es causal penal un aborto cuando la mujer corra peligro de muerte o exista riesgo de afectación a su salud, o a juicio de un médico exista razón suficiente para diagnosticar que el producto presenta alteraciones genéticas o congénitas que puedan provocar daños físicos o mentales graves.

La despenalización del aborto en Jalisco causó reacciones encontradas entre grupos feministas y los que se denominan provida, que se manifestaron todo el día afuera del recinto legislativo.