Cultura
Ver día anteriorLunes 30 de septiembre de 2024Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio
La Buena Impresión cumple cinco años de expandir las artes gráficas en Oaxaca

Para festejar el aniversario, el taller trae a la CDMX la exposición Sobre piedra y papel // El fin es proveer un oficio factible como medio de vida, asevera Fernando Aceves Humana

 
Periódico La Jornada
Lunes 30 de septiembre de 2024, p. 2

La Buena Impresión, taller de litografía con sede en Oaxaca, celebra su primer lustro de vida con la exposición Sobre piedra y papel: Cinco años de creación La Buena Impresión, en Sin Galería, espacio de la colonia Cuauhtémoc, surgido primero de forma digital, y desde año y medio con una sede física.

Es la primera exhibición del taller y lo hace con 19 obras de su producción. Se muestra, además, la carpeta Intuiciones volumétricas, impresa por Pilar Bordes y donada por su editor León Bendesky (colaborador de este diario), porque los fondos recabados de la venta de las obras se destinarán a impartir cursos en comunidades del estado.

Asimismo, se exponen dos piezas impresas por Saúl Villa, quien forma parte del grupo de amigos de La Buena Impresión. El pasado viernes, una selección de obra se llevó a la ciudad francesa de L‘Isle-sur-la-Sorgue, en el contexto de un festival de poesía mexicana.

La Buena Impresión surgió de la donación de una prensa eléctrica de litografía Voirin, de 1909, de los artistas e impresores franceses Julie Gerbaud y Patrick Devreux. El artista Fernando Aceves Humana, cofundador de La Buena Impresión, señala que la pareja lanzó una convocatoria y de las 2 mil respuestas recibidas, escogieron al taller oaxaqueño para que la prensa funcionara 100 años más en programas educativos y en ediciones profesionales.

Inicialmente, la prensa estaba destinada para Camboya; sin embargo, “como no se dieron las condiciones, se armó este proyecto con Daniel Barraza, Francisco Castro Leñero, Dr. Lakra, María Miranda y Guillermo Ramírez Orduña, quien se formó allí”.

Aceves Humana explica el funcionamiento del taller: “Vamos a comunidades, en especial Yanhuitlán, en la Mixteca Alta, donde hemos trabajado mucho, damos un curso, escogemos a los mejores alumnos que luego se forman con nosotros, con la idea de proveer un oficio factible como medio de vida.

Se trata de expandir la gráfica en comunidades rurales y urbanas, y apoyarlos para que creen sus propios talleres.

Uno de sus propósitos es revivir la técnica de la litografía, que tiende a desaparecer. En esa tarea no somos los primeros, apunta Aceves Humana, quien recuerda la labor de Per Anderson y Rafael Ruiz, en Xalapa, con La Ceiba Gráfica. Aprender litografía es una experiencia de vida y un oficio que puede llegar a niveles de calidad extraordinarios. La litografía es un medio que cambió el mundo editorial, y durante un siglo revolucionó la publicidad y todos los oficios de lo humano, incluso, militares.

María Miranda, historiadora del arte y directora de La Buena Impresión, llegó en 2020, cuando el taller contaba con la beca BBVA. Posteriormente, se contó con una coinversión del Fonca, mediante la cual tuvimos acceso a las regiones más alejadas, donde la educación de calidad difícilmente llega, y la artística, aún más.

Foto
▲ Dibujo sobre piedra litográfica elaborado por Iván Bautista.Foto cortesía del taller

Por la supervivencia de la técnica

La exposición Sobre piedra y papel comprende obra de alumnos como Arisa González, de Yanhuitlán, y José de Jesús Luna, de la comunidad costera de Escobilla.

Algunos egresados del taller estudian actualmente en la Escuela Nacional de Pintura, Escultura y Grabado La Esmeralda. Los demás expositores son: Dr. Lakra, María Rosa Astorga, Aceves Humana, Daniel Barraza, Guillermo Ramírez Orduña, Taka Fernández, José Ángel Santiago, Julie Gerbaud, Patrick Devreux, Iván Bautista, Edith Chávez, Bernardo Porraz, Sebastian Fund, Karel Maldonado, Alejandro Aguilar y Saúl Villa.

Oriundo de la capital de Oaxaca, Ramírez Orduña se formó con Daniel Barraza, impresor en jefe de La Buena Impresión, a quien considera uno de los mejores litógrafos vivos del país. Acota: Nos dedicamos sobre todo a formar jóvenes impresores y jóvenes litógrafos para que se involucren más en esta bella técnica gráfica y que perdure en el tiempo.

Hoy día, La Buena Impresión trabaja en varios proyectos; sus integrantes tienen la intención de montar un taller de litografía en la comunidad de Yanhuitlán, donde crean desde hace cuatro años, para que se quede en el museo comunitario Rastros y Rostros. Con los fondos recabados de la venta de obra de la muestra se pretende continuar con los talleres en Escobilla, santuario de la tortuga golfina, y así apoyar a la comunidad para la difusión de las actividades de este hábitat.

Otro proyecto es una colaboración franco-mexicana; consiste en organizar un seminario de seis meses de duración en Camboya, con maestros y ex maestros de la Escuela Nacional Superior de Bellas Artes de París, y con artistas que han trabajado con el taller. Hace 12 años llevamos una prensa que aún es la única en el país. Vamos a implementar el mismo sistema de servicio social que empleamos cuando damos clases en Oaxaca. Es decir, en retribución a los cursos gratuitos, los alumnos se vuelven maestros comunitarios con la obligación de difundir lo aprendido con prensas móviles, explica Aceves Humana. El seminario está previsto para empezar en febrero, con cursos de un mes. Así continuará el sueño común de La Buena Impresión.

Sobre Piedra y papel: Cinco años de creación La Buena Impresión permanecerá hasta el 31 de octubre en Sin Galería (Río Nazas 67, colonia Cuauhtémoc). Para visitarla, concertar una cita en el teléfono 55-3232-0277 o por Instagram.