México. Agroalimentos básicos 2019-2023
ntre los múltiples logros de la administración que ahora termina, la producción de alimentos y el avance en la autosuficiencia no es, desafortunadamente, uno de ellos. La producción de los cuatro granos básicos de la alimentación mexicana (maíz, trigo, frijol y arroz) ascendió en 2023 a 31.9 millones de toneladas, apenas 1.0% sobre la producción de 2018 (Gráfico 1). Por productos, en el periodo la producción de maíz aumentó 1%, y la de trigo 18.1, y decrecieron la de frijol –38.3% y la de arroz 11.2%.
Hay un relativo estancamiento de la producción de básicos (Gráfico 2). El país no ha atinado a dar al campo un esquema integrado de factores que den a los básicos seguridad, rentabilidad y ordenamiento justo que haga de todos ellos una opción tan buena económicamente, o mejor, que producir para un mercado externo inestable, agresivo y que en general no aprecia ni merece nuestros productos. Se propone un recambio de exportaciones e importaciones.
Las importaciones siguen representando un altísimo porcentaje de nuestro consumo básico. En 2023 importamos 29.8% del frijol que consumimos, 41.6% del maíz (casi todo amarillo), 66.4% del trigo, 79.9 del arroz, y 97.1 de la soya (Gráfico 3), todos, además, transgénicos.
El maíz –con mucho el cereal más importante en México– está siendo pagado por los acaparadores al productor a un precio ruinoso de cinco pesos el kilo, que el mayorista duplica de inmediato y el tortillero transforma en nixtamal y éste en tortillas por las que el consumidor paga el kilo de maíz a 35 pesos (1 kg de maíz = 1.5 kg de tortilla). Evitar este agio debería permitir que el productor primario reciba al menos 10 pesos por kilo de maíz y el consumidor no pague más de 18 pesos por kilo de tortilla. Ordenar las cadenas productivas de básicos y preservar la genética es más que posible, máxime que en el caso del maíz blanco (de consumo humano directo) la oferta empata a la demanda (Gráfico 4). La recién anunciada creación de Alimentos para el Bienestar, abre una esperanza.
Con las carnes sucede algo similar. Del consumo de bovino seguimos importando 7.2%, de aves 20.5, y de porcino 44.6% (Gráfico 5).
UNIDAD TECNICA DE ECONOMIA S.A de C.V. CDMX Tel/fax 5135 6765 [email protected]