Veracruz, Ver., Desde el viernes pasado y hasta el cierre de esta edición, habitantes del municipio de Tatahuicapan mantenían cerrada la presa Yuribia y clausuradas las válvulas que abastecen de agua a Coatzacoalcos.

Los inconformes indicaron que durante años el ayuntamiento ha explotado los recursos hídricos de Tatahuicapan y no ha hecho aportes significativos a la región. Exigen que se construya un tanque elevado para que los Cuatro Barrios, comunidad con alta población indígena, cuente con agua en sus casas.

Con ramas y piedras cerraron los caminos que van hacia Tatahuicapan, con la intención de que autoridades no lleguen a la presa; denunciaron que les habían prometido la construcción que solicitan, acuerdo que no se ha cumplido.

Ayer, durante ocho horas, retuvieron al secretario de Gobernación del ayuntamiento de Coatzacoalcos, Andrés Rosaldo García; esta administración municipal pidió una prorroga de 30 días para asignar los recursos y llevar a cabo la obra, lo cual no fue aceptado por los vecinos, y decidieron tomar acciones.

El presupuesto para la construcción del pozo elevado y la infraestructura anexa asciende aproximadamente a 9 millones de pesos.

Elementos de la Secretaría de Seguridad Pública estatal, de la Defensa Nacional y de la Guardia Nacional acudieron al sitio, pero fueron retirados luego de que se abrió el diálogo entre autoridades y inconformes.

El cierre de las válvulas de la presa afecta a más de 300 mil personas en Coatzacoalcos, Minatitlán y Cosoleacaques.

Ésta no es la primera protesta que llevan a cabo los vecinos de Tatahuicapan para llamar la atención del gobierno.