París. El presidente francés, Emmanuel Macron, desaprobó la candidatura de la republicana Laurence Garnier al Ministerio de las Familias debido a sus declaraciones en apoyo al movimiento antimatrimonio homosexual La manif pour tous (La manifestación para todos), informó ayer la cadena BFMTV.

“Emmanuel Macron pidió a (el primer ministro) Michel Barnier que retirara a Laurence Garnier, criticada por su postura sobre La manif pour tous”, comunicó el medio al citar a una fuente con conocimiento del asunto. Garnier también votó en contra de blindar el aborto en la Constitución, un hito aprobado en Francia en febrero, y de crear un delito en 2021 contra las terapias de conversión, asegurando que estas prácticas buscan curar a las personas homosexuales.

El interlocutor consultado por la televisora agregó que Macron no desea que el nuevo gobierno desbarate sus reformas, y señaló que la visión de Barnier en cuanto al matrimonio y familia contradice a la del equipo anterior, al mismo tiempo, señaló que la legislación francesa no permite al mandatario del país formar un gobierno ni impedir que el primer ministro designe a cualquier persona para un cargo.

La oposición de izquierda, que rechazó participar en el gobierno de unidad que pretende el mandatario para superar la actual crisis política en Francia, calificó rápidamente esta propuesta como una inmensa provocación, según la diputada izquierdista, Sarah Legrain.

Si se confirma el nombramiento, sería el perfil opuesto de la actual ministra delegada de la Infancia, Juventud y Familias, la centrista Sarah El Haïry, quien hizo pública su homosexualidad y su embarazo mediante reproducción asistida, indicaron medios locales.

Antier por la noche, el premier propuso, además de Garnier, el nombre de otro senador de su propio partido conservador, Los Republicanos (LR), Bruno Retailleau como ministro del Interior.

Retailleau aboga por endurecer la política migratoria de Macron con una visión cercana a la extrema derecha. Durante los disturbios en los suburbios de París en 2023, hablóde una regresión hacia los orígenes étnicos en estas zonas con población de procedencia extranjera.

Estos nombres generaron malestar entre las filas centristas del futuro gobierno, indicaron medios locales. Después de todo el trabajo que hemos realizado en cuestiones de sociedad, Laurence Garnier y Bruno Retailleau en el gobierno, para mí, es un ¡no!, escribió en su cuenta de X el diputado macronista Ludovic Mendes.